Los alumnos de Educación Secundaría Obligatoria (ESO) que suspendan al acabar el curso harán la recuperación en junio y no en septiembre como se hacía hasta ahora. El Departament de Ensenyament eliminará este curso las pruebas que se hacían pasadas las vacaciones de verano, según ha confirmado la agencia ACN. Los exámenes de recuperación se harían entre el 20 y el 26 de junio. Ensenyament está estudiando implementar esta modificación en Bachillerato más adelante.

La medida, que comunicó el director general de Polítiques Educatives, Carles Martínez, a la Junta de Directors de Ensenyament hace unas semanas, anula una de las políticas que implantó la consellera Irene Rigau con el fin de mejorar los resultados académicos de los alumnos y reducir el fracaso escolar. Desde el Departament se considera que no se han obtenido los resultados esperados ya que no se ha notado mejora del rendimiento escolar en los alumnos con más dificultades y de entornos menos favorecidos.

Petición de los directores

Han sido los propios directores quienes han pedido el cambio, ya que defienden que en junio, con acompañamiento del tutor y apoyo del profesorado, los alumnos con dificultades y de entornos desfavorecidos pueden hacer un sobreesfuerzo que no les es posible en verano, aunque tengan más tiempo. Además, fuentes del Departamento consideran que este cambio está alineado con el nuevo modelo de evaluación global y continuada.

También se ha tenido en cuenta que la convocatoria de exámenes de septiembre dificultaba la organización de los centros durante la primera semana después de las vacaciones de verano, cuando se trabaja para planificar el nuevo curso escolar.