Como ya anunció después de la reunión con el Rey, Rajoy reitera que mantiene su candidatura / EFE.

El discurso de Rajoy con motivo de la reunión de la junta directiva del PP en Córdoba ha puesto el foco en una sola cosa: señalar al secretario general del PSOE Pedro Sánchez como el único obstáculo entre un pacto "lógico, sensato y razonable" con PP, PSOE y Ciudadanos, "con el apoyo de más de 250 escaños" y uno que "puede sumar pero haría mucho daño al país", con PSOE, Podemos, Izquierda Unida y todos los partidos independentistas de la cámara". Ha sido en este punto, cuando la militancia ha emitido un sonoro abucheo.

Sánchez "se ha negado a hablar"

Rajoy ha acusado a Pedro Sánchez de "haberse negado a hablar" y en cambio haber llamado a todo el mundo menos él. De hecho, justamente en medio de su intervención, Pedro Sánchez y el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, han confirmado con pocos minutos de diferencia por Twitter que el candidato socialista se ha puesto en contacto con el de la formación naranja para "dialogar desde el acuerdo o desde la discrepancia".

https://twitter.com/sanchezcastejon/status/690855309145960448

https://twitter.com/Albert_Rivera/status/690855681780482048

Ningún ofrecimiento concreto

Con todo, Rajoy no ha hecho ningún ofrecimiento concreto en Sánchez como sí hizo Pablo Iglesias después de su reunión con el Rey, presentándose candidato a vicepresidente. Únicamente ha hablado de "coincidencias en los grandes objetivos" y de posibles "discrepancias en las políticas" de las cuales, ha dicho, "se habla".

"Con más de 250 escaños podríamos hacer reformas por|para muchos años", ha afirmado Rajoy, aunque se ha vuelto a autoexcluir de una reforma constitucional que defienden PSOE, Podemos y Ciutadans y los ha acusado de "engañar" porque "no tienen bastantes votos para hacerlo".

Discurso del miedo

El único obstáculo para esta gran coalición con Ciudadanos -a los cuales Rajoy ha reconocido que ha incluido en su propuesta para hacer más amplio el acuerdo ya que con el PSOE "llegábamos para conformar un acuerdo mayoritario"- es, según Rajoy, Pedro Sánchez. De hecho, en su intervención prácticamente no se ha referido al partido socialista, sino a su candidato, a quien ha acusado de estar dispuesto a ser un presidente "hipotecado" y "humillado" por Podemos cuando "en la vida no todo vale". "Necesitamos a un presidente con dignidad", ha espetado, con un tono con el que era imposible no recordar el de Pedro Sánchez en el debate electoral en la Academia de Televisión, cuando acusó a Mariano Rajoy de no ser "decente".

"Yo no buscaré apoyos entre los que amenazan la unidad de España, la soberanía nacional y la igualdad de los españoles", ha reiterado, y ha añadido que tampoco lo hará "con los que defienden frivolidades económicas". En cambio sí que ha alertado del peligro que supone que Sánchez "haya regalado senadores" a Esquerra y Democràcia i Llibertat, cosa que criticaron los barones del PSOE como el presidente de Aragón Javier Lambán o el de Extremadura Guillermo Fernández Vara. "Con la mayoría absoluta del PP en el Senado y su condición de primera fuerza en el Congreso, en España no se cometerán disparates que tengan que ver con la unidad de España ni con la recuperación económica", ha asegurado.

"No iré a perder"

Rajoy ha insistido en su intención de no abandonar su candidatura a presidir el gobierno español, aunque se ha negado a "cometer el fraude para los 7 millones de españoles que me han votado de comparecer en la cámara a perder el debate de investidura".

Foto de portada: Mariano Rajoy durante la reunión hoy de la Junta Directiva del PP de Córdoba (EFE).