Desde la cárcel en Alemania, el president Carles Puigdemont ha ejercido por primera vez este jueves su derecho al voto en el Parlament. Lo ha hecho después de que este martes la Mesa de la cámara aceptara su delegación de voto, equiparando su situación de privación de libertad a la de los que están presos en Estremera y Alcalá-Meco.

Lo ha hecho dos meses y medio después de la constitución del Parlament. Concretamente, el president se ha estrenado en esta legislatura para votar contra la propuesta de resolución de Ciudadanos, cuyo texto reclamaba la comparecencia ante la cámara del presidente Roger Torrent, aunque no está previsto ni en el reglamento. El voto ha sido delegado en la portavoz de JxCat, Elsa Artadi, que también tiene delegados los votos de Jordi Sànchez, Jordi Turull y Josep Rull.

De esta forma, JxCat ya tiene efectivos todos sus votos. A la mayoría independentista tan sólo le falta el del conseller Toní Comín, diputado por ERC, que se encuentra en libertad en Bélgica. Este jueves, junto a Meritxell Serret Lluís Puig, declara ante un juez de instrucción en Bruselas para la petición de extradición del juez Pablo Llarena.