En medio de la ofensiva judicial para atribuir a Tsunami Democrática el delito de terrorismo, el president Carles Puigdemont ha instado al independentismo a abrir una nueva etapa para pasar de la resistencia a la propuesta y a la confrontación y hacerlo, además, "con moral de victoria" y superando la desunión que, según ha reconocido, tanto ha perjudicado a este movimiento. Puigdemont ha intervenido ante la Assemblea Territorial del Consell de la República, que hoy se ha constituido después de la renovación de sus miembros, en la Torre del Bisbe d'Elna, y aunque ha evitado referirse a la causa abierta contra él por terrorismo, sí ha ironizado que los jueces que ven los casos contra los independentistas "siempre son los mismos", en referencia a Manuel García Castellón, instructor del caso Tsunami, y Joaquín Aguirre, de Volhov. Por lo que respecta a la ley de amnistía, ha insistido en que la aprobación de este texto no acabará con la represión.

Puigdemont ha dedicado su intervención, de poco más de media hora, y que ha sido precedida por una reunión de la Assemblea Territorial a puerta cerrada, a emplazar a los miembros del Consell a prepararse para lo que ha descrito como "la nueva etapa". "Todos tenemos claro y tenemos ciertas ganas, que tenemos que pasar de la resistencia a la propuesta y a la iniciativa; de la reacción a la recuperación", ha advertido, para lo cual ha asegurado que "hacen falta herramientas, condiciones y estrategia".

Ha expresado el deseo de pasar página a condiciones negativas impuestas por la represión, pero también autoimpuestas. "Tenemos que pasar página al negativismo y el derrotismo, a la desmovilización, y sobre todo a la desunión, que es la madre de todos los males que nos pasan", ha advertido. Puigdemont ha pronosticado que desde ahora hasta el verano "tienen que pasar cosas" y el Consell tiene que tratar de revertir los aspectos negativos porque dispone de las condiciones, por diversidad territorial, pluralidad ideológica y capacidad de resistencia.

Moral de victoria

Ha emplazado el independentismo a un cambio de chip, sin dejar de ser "exigentes, críticos e inconformistas". "Por favor, dejemos de lamentarnos por las esquinas del independentismo, pasemos esta etapa de duelo, y pongamos en valor aquello que hemos hecho, que es mucho. Lo que hemos hecho ha sido extraordinario, histórico", ha asegurado en referencia al 1-O y a la resistencia ante "la potencia represora del Estado español". "Nosotros lo hemos sufrido, pero sobrevivimos. Lo tenemos que vivir con orgullo".

"Teniendo todas las condiciones en contra, con todas las policías fabricando informes y todos los jueces disparando a matar, no nos han doblegado y no nos doblegarán nunca. Por lo tanto, levantemos la cabeza", ha instado, asegurando que si no hay independentistas dispuestos a hacerlo, lo hará el Consell de la República. "Moral de victoria, por favor. ¿Alguien piensa que alguna guerra se gana con moral de derrota? Por más colosal que sea el enemigo", ha emplazado.

Amnistía

En referencia implícita a la ley de amnistía que los partidos independentistas negocian con el PSOE, ha advertido que la represión no ha acabado ni acabará por más leyes que se hagan, que la pulsión represora del Estado español "está más excitada que nunca" y habrá "que "confrontar". "Hemos demostrado estas entrañas profundas del Estado español, que son capaces saltarse el Estado de derecho sin problema. Esta confrontación de cosas sagradas no la podemos rehuir", ha advertido, acusando el Estado español de poner por encima de la libertad y la justicia "el valor de la unidad de la patria". "Haremos los sacrificios que haga falta para defender esta idea", ha asegurado Puigdemont.

Ha reprochado que el Estado no ha sido capaz de proponer al conjunto de los catalanes un modelo social de justicia y libertad. "Por lo tanto, esta confrontación tenemos el deber de hacerla. No podemos renunciar", ha asegurado, además de emplazar a "recoser y rejuntar" el independentismo, para que todos los independentistas vuelvan a hablar con el mismo lenguaje desde opiniones diversas. "Vuelvo a hablar de aquello que nos ha llevado a estar donde estamos, cada uno con su visión legítima, pero reunimos una conversación compartida, porque cuando lo hemos hecho —lo hemos hecho pocas veces los catalanes— pero cuando lo hemos hecho los resultados han sido extraordinarios," ha subrayado.

Por lo que respecta a la estrategia, ha señalado la defensa del referéndum, la confrontación con el Estado y las condiciones para hacer posible la independencia. En este sentido, ha recordado la manifestación en Perpinyà, hace cuatro años, en la que expuso la palabra de orden Preparémonos, que sigue siendo vigente.

Unilateralidad

"Mientras el Estado español se niegue a responder a la demanda democrática del pueblo catalán —porque el derecho a la autodeterminación es derecho democráticamente reconocido incluso en la Constitución de algunos países de la UE— tenemos el derecho y el deber de prepararnos para la unilateralidad", ha asegurado. Puigdemont, que ha recordado que el Parlament no se ha desdicho de la proclamación de independencia, ha emplazado a llevar esta declaración a la práctica. "El derecho a hacerlo de forma unilateral no nos lo quitará nadie. Si alguien tuviera la ocurrencia de decir renuncio a la unilateralidad, no puede hacerlo, porque el derecho a ello lo tiene el pueblo de Catalunya. Nadie puede hablar en nombre del pueblo de Catalunya para decir que el pueblo de Catalunya renuncia a la unilateralidad", ha advertido.

Por lo tanto, el Consell tiene la herramienta y la estrategia, según Puigdemont. "Es evidente que viene una etapa nueva y el Consell tiene la obligación de liderarla. Y todo lo que hemos hecho hasta ahora, ahora toma todo el sentido del mundo. Nos preparábamos para llegar a este momento", ha insistido.

Puigdemont ha hablado de acabar con la losa de la represión y el miedo. En esta nueva etapa tendremos que aprender a no poner la lucha antirrepresiva como la prioridad y a poder poner los recursos al servicio de la independencia.

"Si hoy nos tienen más en la diana que nunca es porque la recuperación de este hilo que os decía, que dejamos el 27-O, depende del Consell, porque somos la institución que lo ha defendido. Como saben que tenemos voluntad de volver a hacerlo, la diana la tenemos nosotros. Eso, en lugar de acobardarnos, nos estimula. Ya tenemos experiencia a luchar y los hemos vencido muchas veces. No les tenemos ningún miedo, de ningún tipo, no les tenemos respeto", ha concluido el president.