El president Carles Puigdemont afirma en el programa 30 minuts que aplicará "lo que dice la ley" después de la votación del 1-O, en alusión a la ley catalana del referéndum, que prevé la declaración de independencia 48 horas después de la proclamación oficial de los resultados del referéndum. "La declaración de independencia, -nosotros no decimos declaración unilateral de independencia-, está prevista en la ley del referéndum como aplicación de los resultados. Aplicaremos lo que dice la ley", ha indicado Puigdemont al programa.

"Son millones de personas que han votado, que quieren decidir. Tenemos que hablar de eso". Es lo que ha expuesto al president de la Generalitat, y también se ha preguntado por qué el Gobierno español querría hablar de una reforma del modelo de financiación ahora, cuando la gente ha salido a la calle y "ha plantado cara a la violencia judicial" para defender el resultado del referéndum.

El jefe del ejecutivo catalán también ha revelado que no tiene contacto con el Gobierno español y asegura que la clave de bóveda de la situación actual es la autodeterminación. Por su parte, el delegado del Gobierno español, Enric Millo, se pregunta por qué el referéndum tiene que ser la solución y apuesta para buscar un consenso en qué cedan las dos partes.

"Un referéndum al final es el síndrome del 50 más 1. Hay vencedores y vencidos. Ganadores y perdedores", asegura el delegado, que considera que no se podrá arreglar nada porque "el conflicto seguirá allí".