Carles Puigdemont ha considerado que el anuncio de reforma de la sedición que ha hecho este jueves el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, simplemente "cambia el nombre" del delito, pero no lo deroga. El presidente de la Generalitat en el exilio invita a "leer muy bien la letra pequeña y la grande" porque, a su parecer, Sánchez "es un maestro en el arte de la engañifa", y pone ejemplos como la ley mordaza o el catalán en Europa.

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Al mismo tiempo, el eurodiputado de Junts per Catalunya opina que si se continúa condenando la organización de un referéndum por la independencia, "que más da si es 15 años de prisión o son 5: están criminalizando un derecho". Puigdemont también se dirige, a aquellos "que celebran" el anuncio de Sánchez "como si fuera la derogación del delito"; este jueves, desde de ERC, valoraban "muy positivamente la supresión del delito de sedición del Código Penal". Los republicanos celebraban que "la eliminación de la sedición es un gran paso adelante, un paso imprescindible en la dirección de acabar con la represión política por el conflicto entre el estado español y Catalunya".

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A su parecer, la "ganancia individual" que supondría la rebaja de penas que comportaría la transformación de la sedición en un delito de desórdenes públicos agravados "no desemboca en una ganancia política. No se desjudicializaría nada". El dirigente independentista es contundente y asegura que lo más importante no es el número de años que dura la pena si no la pena en sí misma. Por eso ha considerado que "lo que cuenta no son los anuncios sino los hechos". Y ha añadido: "Cualquier acusación por los hechos de octubre del 2017 que se haga al amparo de la reforma del delito sería la demostración de un engaño. Porque si realmente el delito se deroga, ya no puede haber condena ni persecución". Y acaba: "Si el octubre del 2017 deja de ser un caso de sedición y pasa a ser un caso de desórdenes públicos agravados, no sé ver dónde está la ganancia política de todo. Sí, hay una gran diferencia entre pasar 15 años en la prisión a pasar 5. Pero políticamente estaríamos allí mismo".

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El pacto

Pedro Sánchez y ERC han pactado la derogación del delito de sedición, que se sustituirá por el de "desórdenes públicos agravados". Desde Palau, el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha celebrado el "paso indispensable en la desjudicialización". La mesa de diálogo acordó en julio impulsar "antes de final de año" las reformas legislativas "que haga" falta para acabar con la "represión" del Estado. Así, la "desjudicialización del conflicto" avanza, y con el aval de socialistas, Podemos y comuns. Por su parte, PP, Cs y Vox ya han criticado el acuerdo entre la Moncloa y ERC. De momento no ha habido ninguna valoración oficial de Junts, que hasta ahora ha insistido en que la reforma que corresponde sobre la sedición es la "derogación" del delito.

El trámite empezará este viernes. El PSOE y Unidas Podemos presentarán la iniciativa legislativa para reformar la sedición y reemplazar el delito por uno de "más o menos homologable" al que tienen otras democracias, tal como ha explicado el presidente español, este jueves por la noche en La Sexta. Sánchez ha recordado que su compromiso es "modernizar y homologar" el delito de sedición "en las principales democracias europeas".