La publicación de los whatsapps que intercambiaron Pedro Sánchez y José Luis Ábalos después de que el presidente del Gobierno cesara al exministro han cogido el PSOE a contrapié y, de entrada, han sumergido a los socialistas en alguna contradicción. La portavoz del partido, Esther Peña, ha comparecido este lunes en rueda de prensa después de que se reuniera la Comisión Ejecutiva Federal, un encuentro presidido por el mismo secretario general del partido. Ante los medios, ha asegurado que la noticia del día en la política española no ha ocupado "ni un solo minuto" de la reunión. Sin embargo, ha dicho que la filtración de estos mensajes es "preocupante", "grave" y supone un "atropello al derecho a la privacidad de las comunicaciones". Ha descartado, por ahora, presentar una denuncia.

 

La portavoz socialista ha recordado que la justicia tiene sus propios "mecanismos" para investigar quién puede haber filtrado estos mensajes al periódico El Mundo. Ha insistido, de hecho, en que los whatsapps que se han publicado "no tienen nada que ver con la causa que investiga la UCO". Y es cierto: no se ha publicado ningún mensaje que se haya enviado después del estallido del caso Koldo, y en los whatsapps no se hace ninguna mención a nada relacionado con esta trama de corrupción. En todo caso, el presidente del Gobierno confiesa a su antiguo escudero que lo echa de menos como mano derecha, por su buen olfato político. "No hay nada relevante", ha destacado Peña ante los periodistas.

En privado, fuentes del PSOE hacen esfuerzos para no acusar a nadie de forma directa de esta filtración, pero señalan que la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil tendría que hacer una investigación interna para saber cómo han llegado estos mensajes a la redacción de un medio de comunicación. Estos whatsapps, de hecho, los tenía la policía porque Koldo García, exasesor de Ábalos, los tenía guardados en un disco duro. Los socialistas están convencidos, de todos modos, de que estos mensajes no incriminan a Pedro Sánchez. "Pero la derecha utilizará cualquier cosa para atacarnos", añaden.

El Gobierno ve "muy grave" la filtración de los mensajes

Este domingo, cuando se publicó la primera tanda de mensajes entre Sánchez y Ábalos, el ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública, Óscar López, denunció que es "muy grave" que se hayan filtrado a la prensa y publicado estos mensajes privados. López, figura próxima a Sánchez y antiguo jefe de su gabinete entre 2021 y 2024, instó a investigar la filtración de estas conversaciones "como se han investigado otras", en referencia al caso del fiscal general del Estado, imputado por la filtración de los correos incriminatorios de la pareja de Isabel Díaz Ayuso. Este lunes el ministro ha sido preguntado por la misma cuestión, y se ha expresado de la misma manera.