Debutar jugando en casa siempre es motivador. Bragados en muchas batallas, los socialistas catalanes han escogido l'Hospitalet de Llobregat para estrenar la campaña electoral, todavía con la resaca del pre-estreno del miércoles con Pedro Sánchez en Viladecans. Una inyección de moral para encarar los diez días que quedan hasta las elecciones y reponerse del golpe que representa la baja de su candidata. Por indicación médica, Meritxell Batet se encuentra en reposo absoluto y no se prevé que pueda reincorporarse hasta ya entrada la semana que viene. En ausencia suya, Miquel Iceta es el protagonista indiscutible. La frase que mejor resume su discurso ha sido la última: "podemos a la vez derrotar la derecha y el independentismo, somos los únicos".

La apuesta del PSOE y Pedro Sánchez de abrazar la estrategia de Cs y PP para defender con toda la contundencia la indisoluble unidad de España tiene un riesgo, específicamente en Catalunya. Y es que en el intento de absorber el votante desencantado de Rivera se dejen electores más moderados por el camino. Por eso, desde el PSC aprovechan cada vez que pueden para incorporar matices y presentarse como una opción central, alejada de los extremos y garante del diálogo. "Eso sólo lo podemos arreglar nosotros", ha sentenciado Iceta y se ha quejado de que haya independentistas que prefieran el cuando peor mejor. "No quieren un 155 sino un 310". Poco antes, Núria Marín lo ha expresado en otras palabras, que "Torra prefiere que haya un trifachito"

El primer secretario del PSC ha agradecido una vez más la tarea de los cuerpos y fuerzas de seguridad para reducir las protestas contra la sentencia y ha criticado que se corten carreteras o se impida dar clase en las universidades. Al mismo tiempo, irónico, "ha reconocido el esfuerzo de Forcadell" por reconocer que no tuvieron suficiente empatía con la otra mitad del país y se ha hecho suyas las palabras de Ponsatí cuando dijo que "iban de farol". ¿"A cuánta gente engatusaron"?, se ha exclamado.

Iceta dedicado buena parte de su intervención a cargar contra los líderes del procés, especialmente contra Torra. "Los activistas no van a cortar carreteras en coche oficial", le ha reprochado. Y para desmarcarse del estilo Cs y PP, se ha comprometido a encontrar soluciones "sin montar pollos ni hacer aspavientos".

A su vez, la alcaldesa de l'Hospitalet, Núria Marín, ha subrayado que "no puede haber política sin diálogo; y sin hablar no se puede negociar, por lo tanto tenemos que hacer el posible para que hablemos". En este sentido, Marín ha sacado pecho de su pacto con Junts per Catalunya en la Diputación de Barcelona y ha dejado claro, ante la insistencia de PP y Cs para que rompa dicha coalición, que no piensa hacerlo. De hecho, ha recibido el aval de Iceta que les ha respondido que eso supondría "dar más poder al independentismo".

Optimizar recursos: Iceta president

Los estrategas del PSC han diseñado la campaña con un ojo puesto en las elecciones españolas y el otro fijado en los próximos comicios en el Parlament. Confiados en que el gobierno de JxCat y ERC tiene los días contados, ha decidido optimizar. De ahí la omnipresencia que tendrá Iceta estos días. Y que en cada una de las intervenciones reivindique la urgente necesidad de echar al president Torra para ponerse él. Porque sólo los socialistas, dice, tienen la receta para intentar solucionar el conflicto catalán. A base de diálogo dentro de la ley. "Les enviaremos al rincón de pensar", ha avisado al independentismo.

El fantasma de la abstención

Los socialistas han puesto esta noche las bases de su relato los próximos días. El discurso pivota sobre cuatro pilares: además de la mano dura contra el independentismo, que la culpa de la repetición electoral es de Podemos -y que no se podía hacer gobierno a cualquier precio-, que la única garantía para evitar las tres derechas es el PSOE, y la medalla de la exhumación de Franco como insignia de las promesas de políticas de izquierdas.

En el cuartel socialista son conscientes de que su gran amenaza es la desmovilización de su votante. Lo ha advertido sólo empezar el propio Iceta. "Hay dos millones de indecisos, en Catalunya mínimo 400.000, si a estas alturas de la vida todavía lo están, o los cogemos de la oreja y aceptamos las críticas o igual no van".

Marín marca territorio con VOX a 350 metros

Casualidad o no, a sólo 350 metros del mitin inaugural del PSC en el Auditorio Barradas, Santiago Abascal arrancaba la campaña de VOX en la Farga.

Núria Marín ha querido marcar territorio. La alcaldesa ha afirmado que a pesar de los pronósticos, "los de VOX no lo han petado, a media tarde ya han ido recogiendo sillas y ahora todavía están recogiendo". Y lo ha rematado. "Los mítines del partido socialista no se pueden comparar con ningún otro partido por mucho que vengan a l'Hospitalet, por mucho que vengan a la Farga".

En las últimas elecciones municipales, con Marín como candidata, los socialistas arrasaron con mayoría absoluta. Pero no sólo eso. L'Hospitalet fue punta de lanza de los buenos resultados del PSC el 28-A en la provincia de Barcelona. El PSC fue primera fuerza, con el 36% de los votos.