La Fiscalía pide penas de hasta 6 años de prisión para una pareja de 50 años, sin antecedentes penales por un atentado contra la autoridad y desórdenes públicos durante las protestas de la detención del president en el exilio Carles Puigdemont en Alemania.

Según el relato del Ministerio Público, la pareja colocó contenedores en medio de la calzada de la calle València de Barcelona para "entorpecer" el avance de la policía cuando se disponía a disolver una manifestación. Por este hecho, la Fiscalía pide dos años de prisión para las dos personas.

Además, para uno de los dos también se piden 4 años más de prisión por un delito de atentado contra la autoridad por tirar, según la Fiscalía, una botella de vidrio contra la policía, aunque no impactó contra nadie. El fiscal considera que la botella fue usada como un "arma u objeto peligroso" y por eso pide aplicar la pena en su grado superior.

Ahora bien, aunque el fiscal mantiene su relato para condenar a los acusados, los únicos testigos son tres agentes de la Guardia Urbana de Barcelona y dos agentes de los Mossos d'Esquadra y las únicas pruebas solicitadas son los historiales penales de los acusados, que de momento son inexistentes, y el informe de los hechos de la Urbana de Barcelona.

Es por eso que, en declaraciones en eldiario.es, la abogada de los dos acusados, Laia Serra, pide su absolución porque los dos acusados asistieron a las concentraciones, pero desmiente que participaran en los disturbios. Aparte de eso los dos acusados niegan el relato de la Fiscalía y remarcan la falta de pruebas. También denuncian que fueron identificados por la Guardia Urbana, y no por los Mossos, horas después de los hechos.

El juicio se celebrará este mismo lunes y quedará visto por sentencia en la sección dos de la Audiencia de Barcelona.

Lanzamiento de artefactos incendiarios

Aparte de la solicitud de penas de seis años de prisión, la Fiscalía también asegura que durante las protestas se lanzaron "artefactos incendiarios, pinturas, papeleras e hicieron barricadas", aunque no responsabiliza de estos hechos a los dos acusados.

Con eso el fiscal destaca que durante la manifestación hubo "violencia y tensión" hacia los Mossos cuando se intentó superar el cordón policial que había ante la delegación del Gobierno en Catalunya. Durante aquellas protestas, los Mossos dieron grandes aceleraciones con las furgonetas para disolver a los manifestantes, hecho que casi provoca más de un atropello de periodistas y concentrados.