El partido Vox ha entrado en el Parlamento andaluz con 12 escaños, un 10,97% de los votos y 395.978 papeletas. Hasta aquí los hechos irrefutables y, a partir de aquí, las interpretaciones. Vox ha dejado de ser extraparlamentario pero no por eso ha dejado de ser de extrema derecha, un partido que, por su ideología, debería ser rechazado y aislado por las fuerzas que se consideran democráticas. Pero la aritmética parlamentaria manda y los de Abascal tienen la llave de la gobernabilidad. Ahora la pelota está en el tejado del Partido Popular y Ciudadanos, segunda y tercera fuerza en el Parlamento andaluz, que no tienen capacidad de articular una mayoría alternativa por ellos mismos y necesitan, sí o sí, los votos de Vox.
¿Y cómo se ve todo ello en la prensa editada en Madrid? Pues con espíritu normalizador. Parece ser que ahora que Vox ya es un partido que forma parte de las instituciones democráticas, los cachorros de Abascal ya sean un partido democrático como todos los otros con capacidad para entrar en el juego parlamentario sin ninguna necesidad de aislarlos.
Atención a los subtítulos
Por eso hoy hay que prestar más atención a los subtítulos de los diarios que a los títulos. Así lo ve La Razón: título principal: "Cambio histórico"; subtítulo: "La irrupción de Vox con 12 escaños daría el Gobierno a la derecha".
ABC, título principal: "Andalucía se cansa del PSOE"; subtítulos: "El descalabro socialista posibilita que gobierne la derecha mediante un pacto entre PP, Cs y Vox" y "La irrupción de Vox en el Parlamento con doce escaños preludia su proyección nacional".
El Mundo, título principal: "Hecatombe del PSOE"; subtítulo: "Vox consigue 12 diputados y la llave de la gobernabilidad para la derecha".
Incluso El País, aunque por lo menos se refieren a Vox como partido de ultraderecha: Título principal: "El PSOE se hunde Andalucía y la ultraderecha irrumpe en España"; subtítulo: "Vox cosecha 12 diputados y tiene la llave de un Gobierno de derechas, mientras Podemos retrocede más de cinco puntos".
Es decir, una vez en el Parlamento, Vox ya parece un actor más de la política andaluza —y próximamente de lo que en Madrid llaman nacional. En conclusión, o bien Vox es un partido de derechas como Partido Popular y Ciudadanos o bien PP y Cs son un partido de la misma derecha que Vox. ¿Se me entiende?
En Catalunya, las cosas por su nombre
Por su parte, los diarios catalanes muestran como el ecosistema mediático, a pesar de las diferencias internas, también es diferente. La tesis que Vox tiene la clave para ofrecer un gobierno de derechas con PP y Cs se mantiene, pero de forma bastante explícita llama a los de Abascal por lo que son, extrema derecha.
Así, El Punt Avui titula: "La irrupción de Vox lleva a la derecha al cambio en Andalucía", para subtitular de manera concisa: "La extrema derecha debuta en el Parlamento andaluz y facilitará la constitución de un tripartito con el PP y Ciudadanos que podría descabalgar al PSOE".
Tampoco se esconde Ara, que además del título "El PSOE se derrumba y la derecha suma gracias a Vox", añade el subtítulo "La formación ultraderechista irrumpe con 12 escaños y podría gobernar junto al PP y Ciudadanos".
A su vez, El Periódico titula: "El 'terremoto Vox' sacude Andalucía" y lo completa con el subtítulo: "El descalabro de Susana Díaz y la irrupción de la fuerza ultra abre las puertas de la Junta a la derecha".
Menos explícita es La Vanguardia, que titula: "Vuelco en Andalucía" y "Vox irrumpe con 12 diputados y tiene la clave para dar la mayoría a la derecha en el Parlamento andaluz".
En todo caso, lo que se infiere de la lectura de la prensa catalana en su globalidad es que se ve Vox como problema, no como solución.