La sombra de unas nuevas elecciones autonómicas se materializa en Extremadura. Después de que Vox se mantuviera firme exigiendo entrar en el ejecutivo extremeño con el Partido Popular, la candidata de los populares, María Guardiola ha mostrado que su partido no tiene miedo a nuevas elecciones. "Iremos a elecciones si hay que ir", ha sentenciado Guardiola este martes en una rueda de prensa.

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La amenaza de nuevos comicios ha estado en el manual de acción de Vox para formar gobiernos con el PP después de las elecciones del 28-M. En varios territorios ha funcionado, pero Guardiola y su equipo han dado un golpe sobre la mesa: Vox no entra en el gobierno. ¿Cuál es la alternativa? Según apunta la líder popular, a la extrema derecha solo le quedan dos opciones: "O Vox da apoyo a mi investidura o elecciones".

¿Por qué el PP extremeño no quiere pactar con la extrema derecha de Vox, cuando otros compañeros de partido lo han hecho sin aspavientos? Guardiola ha respondido: "No puedo dejar entrar en gobiernos los que no se toman seriamente la violencia machista, a los que quitan la dignidad a los inmigrantes y a los que despliegan una lona tirando la bandera LGTBI a la basura". Finalmente, a diferencia de algunos de sus compañeros de partido, la líder popular extremeña ha sentenciado: "Yo no firmaré un pacto asimétrico y lleno de condiciones; no regalaré concejalías ni entraré en batallas culturales que están superadas".

Esta misma mañana, el portavoz de campaña y vicesecretario del PP, Borja Sémper, ha defendido la postura de su partido de formar un gobierno en solitario en la Junta de Extremadura. Sin embargo, eso ha sido antes de la comparecencia de Guardiola o se ha desmarcado de otros pactos del partido con Vox donde se han aceptado los postulados de Vox con respecto a la violencia machista, por ejemplo.

El desacuerdo entre la derecha y la extrema derecha: una victoria para el PSOE

La falta de acuerdo entre las dos formaciones se ha traducido en el hecho de que esta mañana ha sido elegida presidenta de la Asamblea de Extremadura una socialista. Blanca Martín Delgado, del Grupo Socialista, volverá a ocupar la presidencia de la cámara, gracias al desacuerdo de la derecha y la extrema derecha española. PP y Vox no han consensuado un candidato común para conseguir el control de la cámara, de manera que la hora de votar, Martín ha recibido 32 votos, los 28 diputados de su grupo y los cuatro de Unidas por Extremadura, mientras que el candidato del PP, Abel Bautista, ha obtenido 28, el mismo número de escaños que tiene su grupo parlamentario, y el de Vox, Ángel Pelayo Gordillo Moreno el de los cinco diputados con que cuenta su grupo.

Justamente después de esta derrota de la derecha y la extrema derecha en Extremadura es cuando Guardiola ha salido ante los medios a dar un golpe a la mesa de negociación con Vox y no mostrarse asustada delante de unos posibles huevos comicios.