El Partido Popular ha encargado un informe a los servicios jurídicos del Senado para validar el préstamo de escaños del PSC i Sumar a Junts i ERC, con la finalidad de que los independentistas puedan tener grupo parlamentario en la cámara alta. Así lo ha confirmado el coordinador general, Elias Bendodo, este viernes en una comparecencia desde Marbella, donde ha explicado que quieren valorar "la validez" y "la legalidad" de estas decisiones que ha calificado "chambalaje". "Se encargará en las próximas fechas y esperamos que den la información lo más rápido posible", ha dicho el número 3 del partido.

El caso es que la decisión de los servicios jurídicos tiene que llegar antes del martes de la semana que viene, que es la fecha en la que se reúne la Mesa del Senado. En esta reunión, controlada por la mayoría del PP, el órgano de gobierno del Senado tendrá que dar validez o no a la operación del PSOE y Junts per Catalunya. Después de ceder diputados en el Congreso, los socialistas se avienen a ceder cuatro representantes a Junts para que, con Coalición Canaria y el BNG, conformen grupo parlamentario durante la decimoquinta legislatura en el Senado.

En el caso del Senado, el reglamento, que no habla de la cesión de senadores, determina que se tienen que obtener un mínimo de diez representantes para tener vida propia y la particularidad es que, a lo largo de la legislatura, el número puede reducirse hasta seis. Si hay menos, el grupo queda disuelto automáticamente. Después de las elecciones del 23-J, Junts per Catalunya tiene tres senadores -un elegido en las urnas y dos por designación autonómica-. Para llegar a los diez requeridos, los juntaires se han aliado con los dos senadores de Coalición Canaria y el solitario del BNG, con quien quieren compartir grupo propio.

A estos seis, según fuentes parlamentarias, los socialistas suman cuatro componentes para llegar a la barrera de los diez exigidos y, como el mínimo de senadores para mantener el grupo son seis, los senadores socialistas podrán volver al de su formación, siempre que la Mesa acepte la fórmula. En cambio, a ERC no le hará falta ninguna maniobra como esta en el Senado porque los republicanos -que se presentaron a las elecciones en coalición con EH Bildu- ya superan el umbral de diez diputados. El 23-J la coalición catalanovasca obtuvo 11.

En el Congreso, el PSC ha cedido cuatro diputados a Junts y Sumar ha prestado dos a ERC para que ambas formaciones independentistas tengan grupo propio. El martes que viene la Mesa, bajo dominio de la izquierda, dará luz verde a la operación, que se emmarca en las negociaciones para la investidura.

El PP y "el diálogo parlamentario" con Junts

Ante la ronda de contactos con los grupos que pone en marcha el lunes Alberto Núñez Feijóo, el coordinador general del PP ha diferenciado entre "el diálogo parlamentario" de la "negociación, el pacto o el acuerdo". "El diálogo es necesario en un proceso de investidura y la cortesía parlamentaria se tiene que mantener", ha asegurado Bendodo, en referencia a las conversaciones que los populares quieren iniciar también con Junts per Catalunya.