Hace tiempo que el Partido Popular ha erigido en caballo de batalla la prolongación de la vida de las nucleares. Es una reivindicación que ha cogido todavía más vuelo a raíz de la guerra comercial instigada por Donald Trump y el apagón general que el 28 de abril afectó a Catalunya y al Estado. Tanto es así que una de las principales condiciones que Alberto Núñez Feijóo puso encima de la mesa para avalar el decreto de la Moncloa para hacer frente a los aranceles era “ampliar la vida útil de las centrales nucleares”. Ahora bien, el Gobierno no se movió de su posición de partida y el PP acabó votando en contra del texto (solo al lado de Vox). De la misma forma, el líder del PP sacó a colación esta cuestión durante la comparecencia de Pedro Sánchez en el Congreso para dar explicaciones por el apagón: “Eso va de renovables y de nucleares. Para una electricidad estable, hace falta un mix energético equilibrado”, esgrimió Feijóo. Y todo eso va acompañado de una proposición de ley que los populares registraron hace un mes en el Congreso con el objetivo de prolongar la vida de las centrales. Todavía no se ha debatido, pero en Génova confían en encontrar la complicidad de Junts y ERC para que supere el primer examen parlamentario.

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De momento, la única votación nítida que ha habido sobre esta cuestión fue a finales de febrero, cuando el Congreso aprobó una moción del PP para exigir al Gobierno que “extienda la vida útil de las centrales nucleares existentes” gracias a la abstención de Junts y ERC. Hace tres días, el pleno del Congreso también examinó una proposición no de ley del PP relativa a una Estrategia Integral para una Transición Energética limpia, justa y competitiva que incluía un punto que instaba la Moncloa a “reconsiderar” el cierre programado del parque de generación nuclear para “rebajar el coste de la electricidad, reducir las emisiones y reforzar la estabilidad de la red eléctrica y la producción eléctrica que asegure el suministro”. Ahora bien, en este caso, la propuesta del PP se votó al completo y descarriló por la negativa de Vox. Junts se abstuvo y ERC votó en contra. Fuentes del PP consultadas por ElNacional.cat justifican que querían examinar su programa energético globalmente y no la cuestión de la energía nuclear en concreto, que ya fue avalada hace dos meses y medio.

Pedro Sánchez: “Si las empresas acuerdan un calendario diferente, las escucharemos”

El papel de las centrales nucleares centró una parte relevante de la intervención de Pedro Sánchez en el Congreso el miércoles pasado. El presidente español abrió la puerta a aceptar una prórroga de las centrales nucleares, pero impuso tres condiciones. “En 2019, las grandes empresas energéticas pactaron entre ellas un calendario de cierre para las centrales nucleares que aún estaban operativas [de 2027 a 2035]. Si las empresas acuerdan entre ellas otro calendario distinto, nosotros les escucharemos”, verbalizó el presidente español. Y añadió que lo harían “siempre que se cumplan tres requisitos de absoluto sentido común”: que garantice la “seguridad de los ciudadanos”, que sea “conveniente para garantizar la seguridad del suministro eléctrico” y que sea “económicamente viable” y que, por lo tanto, “no sea costa del bolsillo del contribuyente, sino a costa del bolsillo de los ultrarricos que presiden las grandes energéticas que son propietarios de los centrales nucleares”. “Lo que no vamos a hacer es obligar a los ciudadanos españoles es arriesgar su salud o tener que pagar más factura de la luz para que determinadas empresas se sigan forrando”, apostilló.

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Asimismo, Pedro Sánchez aseguró que “ninguna” de las empresas “ha solicitado formalmente que se prorrogue el calendario de cierre”. “He tenido reuniones con estos empresarios y me han dicho que estaban interesados en cerrar las centrales nucleares porque no les sale a cuenta y no son competitivas financieramente”, sostuvo. En el capítulo de reproches a Feijóo, acusó al líder del PP de “defender los intereses sectoriales de personas ultrarricas” y de ser el “portavoz de las grandes energéticas nucleares”. Asimismo, después de sostener que vincular el apagón al debate de las nucleares es “irresponsable” y una “gigantesca manipulación”, esgrimió que la experiencia del 28 de abril ha demostrado que la energía nuclear no es una “solución efectiva”, dado que las centrales “tuvieron que pararse” para “evitar el sobrecalentamiento de los núcleos”. Además, “tampoco contribuyeron a la recuperación del suministro eléctrico porque hasta las 3.15 horas del 29 de abril no desactivaron sus protocolos de emergencia”, concluyó Sánchez.

Feijóo “obligará” a prolongar la vida de las nucleares si es necesario por “interés nacional”

Por su parte, Alberto Núñez Feijóo cambió la disyunción por la copulación y sostuvo que el debate “no va de renovables o de nucleares”, sino que “va de renovables y de nucleares”. “Para una electricidad estable hace falta un mix energético equilibrado. Sin un equilibrio entre energías estables y energías con mucha oscilación, no hay garantía de suministro”, expresó. Por la noche, en una entrevista en Onda Cero, desarrolló un poco más sus planes. “Le guste o no le guste a las eléctricas, si considero que para mi país es fundamental tener energías nucleares, le obligaré a prorrogarlas, por supuesto. Esto de que aquí decido lo que hago o lo que no hago… Usted decide lo que hace o lo que no hace, siempre y cuando no ponga en riesgo la seguridad nacional”, defendió. Y lo justificó por “interés nacional”.

Fuentes del PP expertas en la materia aclaran esta argumentación de Feijóo remitiéndose a la Ley del Sector Eléctrico. Concretamente, el artículo 53.5 fija que el “cierre definitivo” de instalaciones de generación “requerirá el informe del operador del sistema” en el que se consignarán las “posibles afecciones del cierre a la seguridad de suministro”. Además, “se deberá pronunciar motivadamente si este resulta posible sin poner en riesgo la seguridad de suministro”. Y a eso es a lo que se refería el líder del PP.

 

“¿La empresa me va a decir a mí si apaga una central nuclear? ¿Es una voluntad de una iniciativa privada?”, se preguntó Feijóo en Onda Cero. “Yo no pongo en riesgo un apagón en mi país simplemente porque a una empresa no le entre”, añadió. Además, Feijóo rechazó que esto significara “intervenir” las empresas, si no que implica “asegurar la estabilidad energética” de España. “No estamos interviniendo. La energía y la prestación de energía es una actividad regulada”, insistió. Finalmente, esgrimió que la energía renovable es “perfectamente compatible” con la nuclear, que da “soporte, seguridad y estabilidad” al sistema para que “no se caiga”.

El PP busca apoyos para sacar adelante una ley para alargar la vida de las centrales nucleares

Justo hace un mes, el PP registró una proposición de ley con el objetivo de prolongar la vida útil de las centrales nucleares. Desde el PP, apelan a Junts y ERC, que permitieron que la moción se aprobara en el pleno del Congreso. “Confiamos que nos apoyen, buscamos esta amplia mayoría”, verbalizó Paloma Martín, vicesecretaria de Desarrollo Sostenible del PP. “Deseamos que los grupos parlamentarios y los diputados de los territorios en los que hay instalaciones nucleares tengan en cuenta la importancia de contar con la energía nuclear. Negociaremos lo que es bueno para España”, justificó. Entre otras cosas, la propuesta precisa que las empresas podrán solicitar la prolongación de la vida útil y que, en caso de que el Consejo de Seguridad Nuclear emita un informe favorable, el Ministerio de Transición Ecológica tendrá que resolver favorablemente. Además, explicita que, por cuestiones de seguridad energética o necesidad de continuar con el suministro, el Gobierno podrá acordar la continuidad de las nucleares bajo el paraguas del Consejo de Seguridad Nuclear.

¿Y qué dicen Junts y ERC? Los juntaires todavía no han estudiado el contenido detallado del texto del PP. El viernes celebraron una jornada de trabajo sobre “la energía y los retos actuales y de futuro” en la que participaron Jordi Turull, diputados del Parlament y del Congreso, senadores y cargos territoriales. Fue un espacio de trabajo más bien técnico del que no ha trascendido nada. Desde las filas juntaires, tienen que seguir estudiando la cuestión para fijar una posición. Por su parte, fuentes de ERC consultadas por ElNacional.cat recelan de la iniciativa del PP y cierran la puerta de manera casi definitiva a avalar una extensión de las nucleares de la mano de los populares. Sin embargo, desde Génova, insisten a este medio en que su propuesta está “abierta al apoyo de todos los grupos políticos”.

Pilar Calvo (Junts): “No podemos prescindir de la energía nuclear sin nuevas dependencias o riesgos de falta de suministro”

“Estamos analizando qué necesidades tenemos como país y cuáles son las mejores soluciones para garantizar que el tejido productivo y la ciudadanía tengan suficiente energía y de calidad”, esgrimió la diputada Pilar Calvo el martes en el pleno del Congreso. “Estamos estudiando la situación internamiento con rigor y con datos”, subrayó. De hecho, hace pocos días, ella misma registró a una batería de preguntas escritas al Gobierno para saber, entre otras cosas, si tenía previsto “abrir el debate y analizar la posible necesidad de prorrogar la vida de las centrales nucleares para garantizar el suministro eléctrico”.

Hace dos meses y medio, Pilar Calvo sí que fue un poco más explícita. Después de manifestar que Junts no está a favor de “perpetuar la nuclear”, su diagnóstico fue que Catalunya “no puede prescindir” de la energía que aportan las nucleares “sin caer en nuevas dependencias o asumir riesgos de falta de suministro”. “¿Alguien nos puede garantizar que a tantos pocos años vista podemos tener garantías al 100% para prescindir de la nuclear?”, se preguntó. Y ella misma respondió: “Estas garantías nos las tiene que dar el PSOE y hemos podido comprobar que no era de fiar”. “Para salir de este callejón sin salida necesitamos más renovables en Catalunya”, añadió. “Necesitamos que el Gobierno haga los deberes, el paro de las nucleares está ligado al desarrollo de las instalaciones de almacenaje de energía y el Gobierno todavía no se ha puesto ni las baterías ni las pilas”, remachó.

 

Teresa Jordà sostiene que el tiempo de las nucleares se acaba y Jordi Salvador quiere evitar un “cierre improvisado”

Durante el debate en el Congreso, la portavoz de ERC en la Comisión de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Jordà, hizo una defensa a ultranza de las energías renovables y se desmarcó de la energía nuclear. “Nos reafirmamos en la necesidad de avanzar hacia un sistema 100% renovable. […] Ante los desafíos que nos llegan del otro lado del Atlántico, la mejor defensa y la mejor garantía de seguridad es la descarbonización”, subrayó. Y marcó distancias con las centrales nucleares: “Queremos dejar claro que el tiempo de las nucleares se acaba y que el futuro energético pasa por fuentes más limpias, más seguras y más económicas”. La diputada republicana argumentó que “la generación de residuos radiactivos, la dependencia tecnológica del exterior, el envejecimiento de las centrales y la pérdida de competitividad delante de las renovables” son los motivos que los llevan a “plantear seriamente su eliminación progresiva”. “Eso sí, sin olvidar nunca el territorio que las ha sostenido y sus trabajadores”, remachó.

 

Hace tres meses, durante el debate de la moción del PP que sí que salió adelante, quien intervino fue Jordi Salvador, que exigió tres condiciones “innegociables” si se quiere replantear el calendario: “La garantía real de transición energética hacia las renovables, un plan de reindustrialización urgente y efectivo para las zonas nucleares y protección laboral sólida para los trabajadores afectados”. “Nosotros no defendemos alargar la vida de las nucleares, pero tampoco queremos un cierre improvisado que ponga en riesgo la economía y la vida del territorio. El cierre se tiene que hacer, pero se tiene que hacer bien, no se pueden cerrar las centrales dejando un desierto industrial detrás”, subrayó el diputado de ERC, que lamentó que los sucesivos gobiernos españoles no han impulsado “planes de transición energética justos” y no han hecho una “inversión suficiente” en renovables.