El PSOE y Unidas Podemos siguen jugando el dado y nunca acaba de salir un cinco. Así va el parchís de Madrid: todos con las fichas en casa y la partida no acaba de arrancar. Sólo sirve el cinco y es la cifra que no sale nunca. En la Diputación de Barcelona, en cambio, los partidos independentistas juegan al Risk y la partida está en ese momento en que decides qué país vecino atacar y piensas cuál de los otros jugadores te irá a favor o en contra para decidir la dirección de la ofensiva. Si no has entendido esto último, no hay problema: es exactamente lo que ocurre, que es casi ininteligible. Hoy lo sabremos todo.

La Vanguardia y El Periódico dan la impresión de que no saben qué les pasa del gozo que sienten porque comunes y socialistas ("Co&Co", como dice Ara con un deje pelín cursi) hayan pactado el cartapacio municipal de Barcelona y se hayan fotografiado con pinta de pareja que acaba de casarse o, en el caso del diario de los Moll, que anuncia la llegada de un hijo, porque alumbran —dan a luz.

El Punt Avui es lo único que abre con el espionaje del ministerio de Exteriores de Josep Borrell a las delegaciones catalanas en el exterior, cosa que le va de maravilla para destacar que los dos socios enemistados del Gobierno exhiben unidad, determinación y etcétera, porque al menos van juntos en esta cuestión. Es gracioso como El Mundo aborda este asunto. Dice que el Govern ha puesto en marcha una "campaña de descrédito" de Borrell. Si lo dicen ellos, que en "campañas de descrédito" han hecho todos los másters y un doctorado...

EP

ME

LR

AHORA

LV

EPC

EPA

ABC