Una vez más, un día más, las portadas toman el rábano por las hojas y tratan un silbido de pastor como una ópera de Wagner. El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) revocó ayer por la mañana la orden del Ministerio de Sanidad que imponía restricciones a la movilidad en Madrid y otros nueve municipios de la región. La razón de la anulación es una chapuza jurídica: el ministerio justifica el confinamiento con una ley de 2003 que no permite restringir la libertad de movimientos ni otras libertades fundamentales. Como reconoció la Moncloa anoche, los jueces no descalifican el contenido de la orden (confinamientos, etcétera) ni su finalidad (contener la pandemia), sino "la habilitación legal para adoptarla", un simpático eufemismo para no admitir que la han pifiado. Según el TSJM, el ministerio debía ampararse en una ley orgánica de 1986, la misma que fundamentaba una decisión anterior de la comunidad de Madrid de cerrar 37 áreas sanitarias —aprobada por el mismo tribunal.

Hasta aquí, el silbido de pastor. En las portadas, sin embargo, aparece una ópera de Wagner, con todos sus rayos y truenos, volcanes y terremotos. La Razón habla de "pulso". ABC de "desafío". El Mundo de "presión". Incluso los diarios de Barcelona cogen la espada por la punta. Rebregada judicial, dice El Punt Avui. En El Periódico hacen como La Razón. La Vanguardia habla de "revés". Como los prolegómenos de una guerra mundial, parece que el mundo se acaba. Qué pena. Era un día magnífico para que los diarios aparecieran como lo que dicen que son, control de los poderosos y voz de la gente. En cambio, dan la impresión de ser unos hooligans más en este combate de gladiadores en que se ha transformado la vida pública.

Ciertamente, es muy grave —pero mucho— tener que convocar un Consejo de Ministros extraordinario por un error así, que explica más que mil enciclopedias el respeto que le merecen al gobierno español tus libertades fundamentales. Un Consejo de Ministros extraordinario por si acaso la Comunidad de Madrid se niega a dictar una orden basada en la ley de 1986... que ratifique los confinamientos; o se niega a pedir la declaración del estado de alarma al gobierno para que este... ratifique los confinamientos. Si se niega, el gobierno tomará la calle de enmedio y declarará el estado de alarma... para ratificar los confinamientos. Gracias por este esperpento, que dejará Madrid tal como estaba antes de la intervención del TSJM, sí, pero con la ciudadanía preguntándose inquieta quién caray les gobierna. Es fácil imaginar quién sacará más provecho electoral de este Dos de Mayo fake. Pista: color verde.

En la sentencia, el TSJM tiene compasión de los gobernantes y reconoce los obstáculos y "deficiencias" legales con que chocan para "combatir eficazmente la pandemia y afrontar la grave crisis sanitaria que sufre el país", como recuerda una crónica en El País. Los jueces recomiendan una reforma legal que aclare y desencalle la manera de restringir derechos fundamentales para "proteger la integridad física y la salud, íntimamente conectadas entre sí". Es todo un debate. Pero es difícil de titular y hace poca portada. Lástima.

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