Junts per Catalunya se presenta este 14-F -o el día que toque- por primera vez a unas elecciones como partido. El 21 de diciembre del 2017 lo hizo como coalición electoral integrada por el PDeCAT y candidatos independientes. Después de convertirse en partido el pasado mes de octubre, JxCat rompió con el PDeCAT lo cual provocó un litigio por la marca y por los derechos electorales. Finalmente, la formación de Carles Puigdemont se quedó la marca, pero la JEC dio al PDeCAT los derechos electorales.

Eso ha obligado a Junts, por ejemplo, a recoger firmas para poder concurrir a las urnas es 14 de febrero y ha reducido su presencia en los espacios electorales, pero también le ha cerrado la puerta a recibir fondos públicos para financiar la campaña antes de la celebración de las elecciones.

Subvenciones electorales

Los partidos tienen derechos a recibir una subvención del Govern para los gastos electorales. Este dinero se calcula con posterioridad a los comicios en función de los escaños obtenidos y de los votos recogidos. Por ejemplo, en las elecciones del 21-D la subvención fue de 16.101,60 euros por cada escaño obtenido; las formaciones que consiguieron como mínimo un escaño recibieron 0,61 euros por cada voto conseguido; y las formaciones que además formaron grupo parlamentario sumaron 0,17 euros más por cada elector contabilizado en las circunscripciones electorales donde consiguieron obtener escaño.

En el caso de la candidatura JxCat, que obtuvo 34 escaños y 948.233 votos, le correspondieron 1.739.389,32 euros. Este año, el decreto de subvención repite las mismas cantidades, e incrementa hasta 0,20 euros la partida por elector de las candidaturas que consigan grupo parlamentario.

laura estopón JxCatLaura Borràs en la rueda de prensa de presentación de campaña

Aunque las subvenciones se calculan en función del resultado que se obtiene el día de las elecciones, los partidos pueden disponer de parte de este dinero antes de los comicios. Una vez convocada la campaña electoral, pueden pedir al Govern adelantos de hasta un 30% de la subvención que les correspondió en las elecciones anteriores.

En el caso de JxCat, no puede pedir este adelanto porque los derechos electorales se los ha quedado el PDeCAT. El partido de Bonvehí sí podrá pedir este dinero, pero si tal como apuntan las encuestas no consigue ni un solo escaño en el Parlament, tendrá que devolverlo todo.

Candidatos: De 6.000 a 1.500

Ante esta situación, JxCat ha decidido recurrir a los candidatos y a los simpatizantes para poder disponer del dinero de la subvención en lugar de pedirlo a entidades bancarias. "Hay que financiar una campaña electoral desde cero. Es más fácil que nos presten dinero temporalmente que buscar grandes donativos", explica en la página web puesta en marcha con este objetivo.

La formación Puigdemont ha pedido estas aportaciones a los candidatos de sus listas, en función del lugar que ocupan. A los que figuran en los primeros lugares, 6.000 euros, al resto entre 3.000 y 1.500.

Simpatizantes: a partir de 1.500

Con respecto a los simpatizantes, pueden dar créditos de un mínimo de 1.500 euros, pero también se plantea la posibilidad de aportar 3.000 euros o una cantidad superior. Todos los créditos se formalizan a través de un contrato privado y con el compromiso de devolverlos en el plazo de un año, cuando el partido reciba la subvención electoral, y con intereses.

JxCat mantiene igualmente abierta la puerta a las donaciones. A diferencia de los créditos, las donaciones son públicas.

Junts asegura que la iniciativa está funcionando y la intención es no tener que recurrir a préstamos bancarios. De hecho, la previsión es hacer una campaña muy austera, muy condicionada por la pandemia, con actos muy reducidos aunque mantiene una fuerte presencia por el territorio, donde el ticket que forman a la candidatura por Barcelona Carles Puigdemont y Laura Borràs será protagonista.

 

En la imagen principal, la presidenciable Laura Borràs en la presentación de la campaña de JxCat / JxCat