"Es una vergüenza que haya presos políticos en nuestra casa en pleno siglo XXI". Así se ha expresado el eurodiputado de Podemos Miguel Urbán después de visitar al presidente de Òmnium, Jordi Cuixart, en la prisión de Lledoners, donde también ha asegurado que la existencia de presos políticos como Cuixart hacen que España se convierte en una "excepción" en Europa.

Después de que Urbán y la diputada d'En Comú Podem en el Congreso Sònia Farré hayan visitado Cuixart en la prisión de Lledoners, han afirmado que sería mucho "extraño" en cualquier estado europeo que se encarcelara al líder de una las principales entidades socioculturales "para gritar a participar en un referéndum o para organizar expresiones de protesta".

"Entendemos que el caso se tiene que llevar a Europa. Cuixart y el resto de presos políticos tienen que ser fuera de los centros penitenciarios el más bien posible", ha subrayado Urbán.

Coincidiendo con el cuarto aniversario de la consulta del 9-N, Urbán y Farré han visitado Cuixart como muestra de "apoyo" y "solidaridad". La diputada en el Congreso ha explicado que se han podido reunir con Cuixart y han puesto en común la situación política del país al mismo momento que han compartido estrategia en "medio y largo plazo".

Cuixart ha agradecido la vista a través de las redes sociales.