Ya ha empezado la campaña electoral en Euskadi. PNV y Bildu, las dos formaciones que batallan muy cerca para conseguir la primera plaza en los comicios del 21 de abril, ya han arrancado en esta carrera electoral, con el objetivo de poder decir, durante los próximos cuatro años, que son la fuerza que lidera el soberanismo vasco. Las dos formaciones han celebrado sus respectivos actos iniciales de campaña en Vitoria. El partido de la izquierda abertzale ha empezado su acto a las ocho y media de la noche. El acto de los jeltzales ha empezado media hora más tarde.
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"Hemos llegado a estas elecciones con los deberes hechos, porque Bildu ya ha conseguido hacer ver que la posibilidad de cambio es real; hoy nuestra formación ya es percibida como una fuerza de gobierno", ha aseverado Pello Otxandiano, candidato de los abertzales para convertirse en el próximo lehendakari. Ha hablado instantes antes quién le cedió el liderazgo de la candidatura de Bildu en estas elecciones, Arnaldo Otegi, que ha celebrado que en los últimos años, en el País Vasco, "se está renovando el proyecto de Euskal Herria Bildu". El líder del partido ha recordado que actualmente Bildu es la primera fuerza municipalista en el País Vasco y que ahora "la oportunidad histórica" pasa para colocar la izquierda abertzale en la primera posición en las urnas de las elecciones autonómicas. "Después del 21-A nada ya será igual", ha rematado Otxandiano.
El PNV ha planteado los comicios como una disyuntiva entre dos modelos. "El 21 de abril tenemos que escoger entre experiencia y capacidad de gestión u ocurrencias de última hora e incertidumbre. Entre un futuro mejor o peor para Euskadi", ha advertido Imanol Pradales, candidato de los jeltzales a dirigir el gobierno vasco. Más duro ha sido el actual lehendakari, Íñigo Urkullu, que ha cargado directamente contra Bildu, acusándolos de situarse "a la contra" cuando el país "ha vivido dificultades". "Los pierde su objetivo de asaltar el poder y desalojar del gobierno de las instituciones al PNV, más que trabajar para toda la sociedad", ha lanzado. No ha faltado tampoco el presidente del partido, Andoni Ortuzar, que, consciente de como de ajustadas pueden ser las elecciones, ha instado los presentes a "buscar uno indeciso cada día y convencerlo para que vote al PNV".
La dificultad de Bildu para poder gobernar
Lo cierto, sin embargo, es que Bildu puede ganar las elecciones, pero lo tiene muy complicado para gobernar Euskadi. Porque la investidura de un lehendakari funciona igual que en la elección de un alcalde, y no depende de quién consigue sumar una mayoría absoluta, sino de quién consigue más votos. Por mucho que Bildu quede primero en estas elecciones, solo habría un espacio que estaría dispuesto a entregar sus votos a la izquierda abertzale: Sumar y Podemos; que todo indica que sacarán resultados desastrosos.
El PSE ya ha asegurado que en ningún caso dará apoyo a la izquierda abertzale. Tampoco lo hará el PNV. La intención de jeltzales y socialistas es mantener vivo el matrimonio que mantiene actualmente a Iñigo Urkullu como lehendakari. Todo indica que el PSE acabará votando a favor de la candidatura de Imanol Pradales como presidente vasco. Incluso el PP escogió, después de las elecciones municipales del pasado mes de mayo, entregar antes sus votos al PSE y al PNV para evitar alcaldías de la izquierda abertzale. Además, hoy en día, es todavía inviable que el PNV haga lehendakari un candidato de Bildu. Este sistema electoral que evita el bloqueo político, pues, supone una enorme dificultad en Bildu para conseguir el poder. "Bildu tiene más que asumido que no gobernará", apunta a este diario una fuente de la dirección del PSOE.