Los abogados de Carles Puigdemont y Jordi Sànchez, Jaume Alonso-Cuevillas y Jordi Pina, han denunciado este lunes las enormes dificultades que tienen para trabajar en la defensa de sus clientes en las prisiones y en el exilio. Pina ha criticado que tiene que preparar la defensa de Sànchez desde detrás de un cristal y la mayoría de veces sin ordenador. Por su parte, Cuevillas ha denunciado que se tiene que reunir con Puigdemont en aparthoteles, aunque las condiciones son mejores. Cuevillas también ha querido aprovechar para felicitar la enorme tarea que están llevando a cabo todos los abogados defensores.

Los dos abogados, también han dejado claro que los nueve presos políticos están en muy buen estado y que con la última declaración ante el juez Llarena se pudieron "quitar un peso de encima", ya que pudieron decir todo lo que sienten y piensan. Han reiterado, los dos, la libertad de sus clientes, ya que "son totalmente inocentes" y nadie los ha sentenciado, y que, por lo tanto, "se les está adelantando la pena". Además, también han afirmado que tienen argumentos sólidos, jurídicos y técnicos para defender que los presos no tendrían que estar "ni un día más en la prisión".

Por último, también han comentado que están preparados para defender posibles juicios por rebelión, sedición y malversación, de los cuales están imputados sus clientes, e incluido un posible delito de desobediencia. Aunque han declarado que el delito de malversación no se aguanta por ningún sitio y que la rebelión es lo que hizo Tejero, no lo que pasó en Catalunya.