El catedrático de Derecho Constitucional Javier Pérez Royo ha manifestado en un artículo en Eldiario.es, que si el juez Pedro Llarena no permite a Jordi Sànchez presentarse a la investidura como diputado que es, cometerá prevaricación. "Impedir el ejercicio del derecho de sufragio activo o pasivo sin sentencia judicial firme es el más grave delito de prevaricación que se puede cometer en democracia. Es un delito de prevaricación contra la democracia de forma directa", añade.

Según Pérez Royo, con la Constitución española en la mano no es posible impedir la investidura de Jordi Sànchez. Y apunta que en caso de que el juez la impidiera, Sànchez se podría querellar entonces contra él por prevaricación, y además podría solicitar la nulidad de toda la instrucción".

"El juez instructor estaría cometiendo un delito tan grave que lo inhabilitaría para el ejercicio de la función jurisdiccional a partir de este momento, además de comprometer de forma sobrevenida todas sus decisiones anteriores en esta causa," señala.