Pedro Sánchez está dispuesto a ir a una investidura fallida para activar la cuenta atrás de las elecciones. Así lo ha confirmado este lunes el secretario de Organización del PSOE, José Luís Ábalos, que ha explicado que el dirigente socialista quiere presentarse a la investidura "en breve", aunque no tenga todos los apoyos necesarios para superar la votación, como es el caso en la actualidad. Desde Ferraz mantienen como estrategia conseguir la abstención de Ciudadanos, un escenario que sin embargo parece improbable.

El también ministro de Fomento en funciones ha asegurado que Pedro Sánchez contempla el escenario de un debate donde haya votos que se acaben decidiendo "en aquel momento", en el mismo instante de la votación en el Congreso de los Diputados. La realidad es que ahora mismo no sólo no tiene los apoyos necesarios, sino que además necesitaría de la abstención de los diputados de ERC para asegurarse la reelección.

"No puedes decepcionar, hay que asumir el mandato electoral y el mandato del Rey", ha asegurado el dirigente socialista en rueda de prensa desde Ferraz. Ha insistido en la necesidad de poner en marcha el mecanismo de la investidura lo antes posible porque "no hay alternativa al PSOE" y porque España "necesita un gobierno" que deje de estar en funciones.

Por otra parte, Ábalos ha vuelto a cargar contra Ciudadanos, especialmente tras el pacto en ayuntamientos como el de Madrid, y antes de los posibles pactos en comunidades autónomas. "Es incomprensible que si quiere liderar el centroderecha dé más poder al PP", ha asegurado el secretario de Organización, que ha criticado la "fijación" de Albert Rivera contra los socialistas. "No se puede calificar de centro liberal y progresista al que se sustenta en un partido nostálgico del franquismo como Vox", ha insistido.