Òmnium Cultural ha señalado la "parcialidad" del magistrado del Tribunal Supremo (TS) Manuel Marchena, presidente del tribunal que juzga a los presos independentistas, como muestra de la "baja calidad democrática del Estado", en palabras del vicepresidente de la entidad, Marcel Mauri.

Además, la entidad también ha denunciado que el Tribunal Constitucional (TC), que ha vuelto a denegar una petición de libertad condicional para su presidente, Jordi Cuixart, la "criminaliza" para "justificar" la prisión preventiva de su líder.

El mismo Cuixart ha hecho llegar un mensaje a través de Òmnium desde la prisión en que alerta que la asociación no caerá en el "chantaje judicial" y subraya de que "ninguna de las amenazas ni intimidaciones" hará que la entidad renuncie al derecho de autodeterminación.

Mauri ha considerado que tanto el posicionamiento del TC como la actitud de Marchena, que hoy ha "impedido" que los abogados de Òmnium pudieran interrogar a sus testigos, ponen en cuestión la calidad de la democracia española.

Òmnium también ha expresado un desacuerdo "máximo" con la actuación de Marchena durante los interrogatorios propuestos por la defensa de Cuixart, y ha subrayado que el magistrado "vulnera el derecho de defensa" cuando "interrumpe de forma constante" las declaraciones de los testigos y "censura preguntas y respuestas" con un criterio "restrictivo" comparado con testigos de la acusación.

Por todo ello, Òmnium considera que el proceso contra Cuixart es "un ataque" a la sociedad civil, y afirma que su juicio implica la "redefinición" de los límites de los derechos fundamentales.