Nueva petición de prisión para el rapero Pablo Hasél. Esta es de dos años y medio más, que se sumarían a los dos años y medio más por los cuales ya cumple condena más una nueva sentencia de 16 meses que recibió el pasado mes de marzo.

En esta ocasión se trata de unos tuits contra el Betis en que el rapero deseaba que el avión del equipo se estrellara por el apoyo expresado al jugador ucraniano Roman Zozulya, a quien acusa de "nazi". Concretamente, Hasél escribió: "A la plantilla del Betis que defiende al nazi, si no fuera porque también morirían pilotos y azafatas, le desearía que su avión se estrellara". En otro tuit escribió: "Porquería de jugadores del Betis hablando de linchamiento contra el jugador nazi; linchamiento es lo que hacen los nazis".

El rapero se ha defendido ante la jueza de Sevilla que lleva el caso alegando que los tuits en los que llegó a desear que el avión del Real Betis se estrellara sólo tenían como finalidad "denunciar los crímenes" del jugador en su país. Rivadulla ha declarado por videoconferencia desde la prisión de Ponent (Lleida), dónde está ingresado desde mediados de febrero para cumplir una condena de nueve meses por enaltecimiento del terrorismo e injurias en la Corona.

"Hay incontables pruebas que Zozulya es un conocido nazi que estaba dando apoyo explícito a milicias ucranianas que bombardeaban y asesinaban niños", ha expuesto el acusado durante el juicio, en el que sólo ha respondido a su abogada. "Sólo pretendía denunciar este contexto de crímenes a Ucrania y a los cómplices de este nazismo", ha añadido Hasél, quien en relación con la querella del Betis ha recordado que antes de sus tuits ya hubo "numerosas denuncias contra el jugador y los clubs que lo contrataron".

Los argumentos del Betis

La abogada del Betis ha lamentado que el rapero "ha conseguido asociar el Betis con la defensa del nazismo" y ha considerado que "esto no puede pasar como un simple comentario soez o de mal gusto" porque "ha intentado difamar a un colectivo". La letrada también acusa por coacciones porque Zozulya, después de volver al Betis, "no pudo ejercer su profesión".

La Fiscalía pide la absolución

La Fiscalía, por su parte, ha solicitado la absolución de Pau Rivadulla, nombre real del músico, al entender que los tuits son "groseros", pero no un delito, según han informado fuentes judiciales en Efe. Tampoco hubo coacciones, ha añadido, porque "unas declaraciones contra un individuo no tienen entidad para constreñir todo un club".

El Juzgado de lo penal número 9 de Sevilla ha dejado este lunes visto para sentencia el juicio contra Hasél, por quien el Betis ha elevado a definitiva su petición de dos años y medio de prisión y una multa de 5.400 euros por un delito de odio, así como otras multas de 6.000 y 1.200 euros por injurias y coacciones, respectivamente.