Los grupos parlamentarios están dispuestos a llevar hasta las últimas consecuencias el acuerdo que firmaron PSC, ERC, Junts, CUP y comuns para minimizar la voz de Vox en el Parlament. Estos grupos están negociando un acuerdo para el reparto de los órganos de gobierno de las 15 comisiones legislativas que se constituirán en la Cámara catalana donde no se contempla que Vox asuma ninguna presidencia ni ningún sitio de responsabilidad en el órgano de gobierno de ninguna comisión, según fuentes de los diferentes grupos consultadas por ElNacional.cat.

Las creación de las 15 comisiones -una por cada departamento del Govern, excepto Agricultura y Acción Climática que se divide en dos- se ha aprobado esta semana en el pleno y la semana próximo está previsto que la Mesa, de acuerdo con la Junta de Portavoces, proponga el reparto entre los grupos.

Según el Reglamento de la Cámara cada comisión tiene que tener una mesa formada por un presidente, un vicepresidente y un secretario. El artículo 49 del Reglamento establece que estas responsabilidades se tienen que distribuir "proporcionalmente" y "en función del número de diputados".

No obstante, el reparto que preparan los grupos no contempla que Vox asuma ninguno de estos cargos en ninguna comisión, a pesar de que sus 11 diputados sitúan el grupo que preside Ignacio Garriga como el cuarto de la Cámara.

El acuerdo para frenar a Vox que firmaron los tres grupos independentistas junto con PSC y comunes poco después de la constitución del Parlament, dejaba claro que los grupos se comprometían a los "acuerdos necesarios" para impedir la presencia de la extrema derecha a la mesa del Parlamento o a las mesas de las comisiones.

Senadores autonómicos

Este debate ya se planteó hace un mes cuando el Parlament tenía que escoger a los senadores por designación parlamentaria. Entonces los grupos optaron por aplicar una variante de la ley de Hont, denominada Imperiali, que permitía el reparto de manera proporcional, como exige el Parlament, y al mismo tiempo cerrar el paso en Vox. La formación de extrema derecha protestó por aquella decisión y anunció la presentación de un recurso al Tribunal Constitucional.

En el caso de las comisiones, además, está el añadido de que los miembros de las diferentes mesas tendrán que ser ratificados también por los diputados que integren cada una de las comisiones -que se reparten también de manera proporcional en función del peso de cada grupo-. Por lo tanto, el nombramiento, aunque se planteara, tendría que recibir el voto a favor de los diputados a las comisiones.

 

En la imagen principal, el presidente del grupo de Vox, Ignacio Garriga / ACN