Una vecina de Santa Margalida, en Mallorca, no ha conseguido la nacionalidad española porque solo domina el catalán y no tiene bastante conocimiento del castellano. La mujer hace casi treinta años que vive en la isla, donde llegó desde África y ha visto como su falta de agilidad con el castellano le ha supuesto una denegación de la nacionalidad. La mujer presentó un recurso contra la denegación de la nacionalidad y ahora la Audiencia Nacional ha avalado la decisión administrativa.
Según ha adelantado el Diario de Mallorca, la mujer llegó a Santa Margalida en 1996. Ahora hace tres años pidió la nacionalidad española y no se le concedió, porque en la entrevista con el juez encargado del registro civil no justificó lo suficiente el grado de integración y porque "no habla ni entiende el castellano". La sentencia subraya que si un extranjero, que hace mucho tiempo que reside en España, pretende obtener la nacionalidad, es necesario que disponga de un conocimiento suficiente del idioma español. No es suficiente con conocer el idioma que se utiliza a la comunidad autónoma donde reside, subraya.
Esperaba una entrevista en catalán
Disconforme con la decisión, la mujer de Santa Margalida presentó un recurso en el que alegó que domina el catalán, ya que es la lengua que utiliza para relacionarse y comunicarse con los vecinos de la localidad, donde vive desde hace años. De hecho, añade que se esperaba que la entrevista con el juez para conseguir la nacionalidad fuera en catalán y no en castellano. Además, en su expediente, la mujer adjuntó los certificados oficiales del Ayuntamiento de Santa Margalida que acreditan que ha participado en unos cuantos cursos de alfabetización.
Para conseguir la nacionalidad española, hay que acreditar que hace más de diez años seguidos que se reside en España y el proceso incluye un trámite administrativo que concluye con una entrevista personal con el juez del registro civil. El magistrado hace preguntas al interesado relacionadas con las instituciones españolas y comprueba el nivel de lengua española que tiene.
Catalanofobia en Mallorca
Justo hace una semana se hizo público el enésimo caso de catalanofobia en Mallorca. La Unió Esportiva Petra, de Mallorca, denunció un caso de violencia lingüística. El equipo alertó de que el entrenador del equipo Alevín B fue expulsado durante un partido contra el Club Cardassar Atlètic por dirigirse en catalán a la árbitra. La junta directiva del club explicó que en el acta del partido que redactó la colegiala señalaba que "en el descanso, el entrenador titular pasa a dirigirse a mí en catalán. Al pedírmele que se dirigiera en castellano, perpetuó su dialecto. Llegué a comprender faltas de respeto y, sin conseguir que parara, decidí expulsarlo".