El Ayuntamiento de Mont-roig del Camp (Tarragona) ha anunciado que emprenderá acciones legales contra el DJ Ruben Romero, después de que este, durante una actuación en la Fiesta Blanca de Sant Jaume de Miami Playa, profiriera insultos contra autoridades del Estado e incitara al público a corear cánticos ofensivos. Los hechos tuvieron lugar la madrugada del sábado pasado. El DJ había sido contratado por el mismo Ayuntamiento para amenizar la Fiesta Blanca, celebrada en la Punta del Riu, una de las citas destacadas del programa festivo. El equipo de gobierno ha expresado su malestar por lo que consideran una conducta totalmente inapropiada en un contexto festivo que tendría que fomentar la convivencia y el respeto mutuo.

Según el consistorio, el pinchadiscos, ya a altas horas de la noche, empezó a proferir graves insultos contra las autoridades del Estado, con comentarios que el consistorio considera claramente constitutivos de un delito de incitación al odio", han indicado en un comunicado. Concretamente, fuentes municipales apuntan que el DJ gritó expresiones como "perro Sánchez", en referencia al presidente del Gobierno, y animó al público asistente a repetirlas, hecho que habría generado malestar entre varios asistentes. Estos comentarios que podrían constituir un delito de incitación al odio, tal como recoge el artículo 510 del Código Penal, que penaliza los actos que fomenten o promuevan el odio, la discriminación o la violencia por motivos de ideología, raza, identidad, sexo u otras condiciones personales o sociales.

 

El alcalde de Mont-roig del Camp, Fran Morancho (PSC), ha condenado de forma contundente la actuación del DJ: "El Ayuntamiento no puede permitir que en un espacio de ocio, de fiesta y de complicidad entre los jóvenes del municipio se hagan este tipo de comentarios, que claramente son una incitación al odio." Morancho ha añadido que "nos encontramos en un momento en qué se están viviendo constantes ataques a la convivencia, al respecto y a los valores fundamentales, y desde una institución como la nuestra, no podemos ser cómplices de este tipo de acciones. Por eso hemos decidido actuar. No se puede mirar hacia otro lado."

Finalmente, el consistorio ha reiterado su compromiso con la promoción de un entorno de respeto y convivencia, y ha manifestado que seguirá trabajando para que las actividades públicas en el municipio se desarrollen en un marco de valores democráticos. La denuncia formal se presentará en los próximos días.