Sant Martí Sarroca, en el Alt Penedès, tenía un Ayuntamiento presidido por un alcalde de la CUP, Antoni Ventura, que gobernaba con un pacto con ERC y los socialistas (de la candidatura Movem Sant Martí). Ahora, un acuerdo entre el PDeCAT y el PSC ha permitido dar la alcaldía, con mayoría absoluta, a Josep Olivella, del PDeCAT, mediante una moción de censura.

Olivella ha anunciado que renunciaba a cobrar el sueldo de alcalde e incluso ha asegurado que no le interesaba ser alcalde en la próxima legislatura. La CUP y ERC han criticado con dureza que el PDeCAT pacte con los socialistas, que han apoyado el 155. Además, se ha apuntado la sospecha de que gobierne en la sombra Ramon Carbó, el discutido exalcalde de la localidad. Carles Riera, de la CUP, ha pedido explicaciones al PDeCAT, y ha afirmado que los pactos republicanos tienen que empezar en los municipios.

La crisis municipal en Sant Martí Sarroca puede tener un impacto negativo sobre el intento de Jordi Graupera de conseguir una candidatura unitaria soberanista para las elecciones municipales en Barcelona.