Vox afronta las elecciones municipales con unas perspectivas muy por debajo de las expectativas creadas hace unos meses tras el éxito en las elecciones andaluzas del pasado diciembre y el moderado impulso conseguido el 28-A, lejos de lo que auguraban las encuestas.

Ahora, ante unas municipales donde solo presentarán listas en 772 municipios -de un total de 8.131- se ha impuesto una norma preventiva, exigir certificado de antecedentes penales a sus candidatos.

Según avanza ‘El Mundo’, el partido de ultraderecha ha creado un equipo especializado que revisa los eventuales antecedentes penales de sus candidatos con el objetivo de evitar que se les cuelen personajes de dudoso pasado.

Pocas listas

El partido de Abascal intenta así contener a la formación, razón por la cual solo se presentan en menos de un 10 por ciento de municipios -un centenar de ellos en la Comunidad de Madrid-.

La medida trata de evitar casos como el del número siete de la lista de Alcalá de Henares (Madrid), vinculado con la organización nazi Hermandad Aria. Otro caso es el del candidato a la alcaldía de Benidorm, sustituido tras salir en prensa que fue condenado recientemente por un delito de violencia machista.