Un mecánico de Reus está siendo investigado por uno presunto delito odio para negarse a atender el coche de una agente de la policía española que lo llevaba para pasar la revisión rutinaria. Así lo publica Diari Més, que explica que eso pasó el 31 de enero y que ayer ya fue a declarar en la comisaría de Mossos D'Esquadra de Reus, aunque se acogió al derecho de no declarar.

El mecánico está representado ahora por el miembro del colectivo de Advocats Voluntaris del 1-O David Piqué, que asegura que al no haber podido acceder al atestado, no saben ni quien ha interpuesto la denuncia. Lo que es seguro es que, si finalmente se incoan diligencias, Jordi Perelló será citado a declarar, pero ahora en sede judicial.

Según ha explicado el propio mecánico en El món a RAC1 que el marido del agente "vino, me amenazó y me dijo que estaban hartos de los delitos de odio".

Si finalmente se incoan diligencias, Perelló será citado a declarar, pero ahora en sede judicial, aunque ha recordado que "como mi taller no es marquista, estoy amparado por un real decreto que dice que tengo todo el derecho de escoger qué vehículos quiero reparar y cuáles no".

El policía habría llamado al mecánico para pedir hora para hacer la revisión habitual y Perelló se negó a atenderlo por "convicciones personales". Y es que desde el 1-O decidió no ofrecer ningún servicio más en los agentes tanto de la Guardia Civil como de la Policía Nacional española.