Artur Mas propone dos fórmulas para reunir de nuevo el espacio político entre su partido y Junts per Catalunya, el de Carles Puigdemont. Una sería "una coalición electoral" entre ambas fuerzas y otra que "el PDeCAT no se presente a las elecciones pero en la lista de Junts haya representantes designados por el PDeCAT". Mas lo ha dicho en una entrevista al diario Ara, la primera después de anunciar que no deja el PDeCAT y en la que añade pocas novedades a lo que explicó el martes pasado.

El expresidente también pide a Carles Puigdemont que explique qué quiere decir con "confrontación inteligente": "Es importante que JxCat concrete qué quiere decir la confrontación inteligente y que lo explique con pelos y señales a la ciudadanía", aunque "más importante es que ERC, JxCat y el PDECAT, si finalmente fuera por separado, pacten un plan de acción conjunto. Si no hay hoja de ruta común, ¿quién nos tomará en serio? Ahora bien, eso quiere decir que todos tendrán que renunciar a alguna cosa".

El tono de las declaraciones no es de confrontación, aunque deja caer algunas indirectas. Sobre las diferencias entre ambos partidos: "Puigdemont y yo defendemos lo mismo. Tan importante es mantener vivo el proyecto soberanista y hacerlo avanzar como gestionar la gobernación del país". Sobre el legado de CDC y los casos de corrupción: "¿Por qué tenemos que poner un cortafuego [con Convergència] respecto a un proyecto que fue ganador en Catalunya durante un montón de años? El proyecto sigue siendo válido". Sobre su voto: "Lo que haré es ver las candidaturas y especialmente qué defiende cada una de ellas, y en función de eso decidiré".

Mas se declara "decepcionado" por el desacuerdo. "No lo acabo de entender. Siempre habíamos podido hacerlo, incluso cuando había Convergència i Unió. Siempre conseguimos acabar entendiéndonos hasta el día que fue inevitable la separación por un tema estructural de fondo: si estábamos a favor o no de la independencia".