Fernando Grande-Marlaska ha cambiado su opinión sobre la amnistía y ha afirmado que "hay que tirar hacia adelante y que las heridas cicatricen", después de presidir este miércoles la reunión de coordinación del dispositivo de seguridad para las cumbres que acoge Granada el jueves y viernes —en el marco de la presidencia española de la Unión Europea. Es un tono renovado, que contrasta con el que utilizaba anteriormente. En 2019, por ejemplo, dijo que "todas las pretensiones que se formalicen tienen que ser en el marco de la Constitución y de la ley" y que la amnistía "no está reconocida". Ahora, el ministro del Interior en funciones y próximo a la monarquía ya no se opone frontalmente y señala que "ha quedado muy claro" que "todo" lo que se negocie para la investidura quedará encuadrado en el "diálogo", en el marco de la Constitución.

En esta línea, Marlaska se ha mostrado convencido de que habrá investidura "con éxito" después de quedar "expresado por el conjunto de la sociedad española lo que quería" en las urnas —en referencia a "un gobierno de progreso". También ha apostado por abordar "todas las políticas de diálogo que generan cohesión, curen heridas y miren al futuro dentro del marco constitucional". Es decir, que se trata de seguir trabajando en la cohesión social" y "territorial, así como "en el bienestar y en el crecimiento de todo tipo". Finalmente, ha insistido en el hecho que se dan las condiciones para que haya un ejecutivo presidido por Pedro Sánchez "en el plazo legalmente establecido" por la Constitución.

Guardias civiles y policías, contra Marlaska

El ministro del Interior ha hecho estas declaraciones el mismo día que el sindicato de la Policía Nacional JUPOL ha anunciado que participará en la manifestación del 8 de octubre en Barcelona, contra la amnistía y por la posible "expropiación" de la comisaría de Via Laietana para instalar un museo en memoria de las víctimas de torturas —tal como reclaman los partidos independentistas. El cuerpo aprovechará la protesta para denunciar los "ataques" que presuntamente recibe y rechazar que puedan ser "moneda de cambio" en la investidura de Sánchez. La manifestación está convocada por los españolistas de Societat Civil Catalana (SCC) y con el lema "No en mi nombre. Ni amnistía, ni autodeterminación".

Por otra parte, las siete asociaciones representativas del Consejo de la Guardia Civil han censurado la gestión de Marlaska por "no dar la cara" ante "el ataque sin precedentes" que sufren y la pérdida de competencias del cuerpo. En una rueda de prensa este miércoles, han pedido una reunión urgente al ministro y lo han interpelado directamente: "¿Quién nos defiende?". Concretamente, han denunciado su ausencia al inicio de la sesión del Pleno del Consejo de la Guardia Civil el pasado 28 de septiembre porque se encontraba en Bruselas.