El ministro de Asuntos exteriores en funciones, José Manuel García-Margallo, se ha reunido hoy con el secretario vaticano de Relaciones con los Estados, Paul Richard Gallagher, con quien ha abordado el independentismo en Catalunya y la situación política en España. García-Margallo ha entregado a Gallagher una carta, que también ha dado a su homólogo italiano, Paolo Gentiloni, en la cual se explican las razones de España respecto de la hoja de ruta independentista catalana.

En el texto, Margallo contempla la posibilidad que Catalunya aprobase una declaración unilateral de independencia, que el ministro ha recordado que sería "contraria a la Constitución (...) contraria al Derecho Internacional". "Si se produjera una salida con una declaración unilateral de independencia, Catalunya no sería un Estado, ni reconocido como Estado por Naciones Unidas", asegura, insistiendo en el hecho que "uno no es un Estado cuando dice que es Estado. Le tiene que reconocer la comunidad internacional como Estado".

Ha recordado al respecto que en las Naciones Unidas existe un procedimiento que señala que "para ser Estado se requieren 9 votos del Consejo de Seguridad y ningún veto. Inimaginable. Y después requieren 129 votos de la Asamblea (General de la ONU). Así que imaginad... y si no es un Estado pues no puede seguir en la Unión Europea".

Ofensiva internacional

El jefe de la diplomacia española ha dicho que "la Generalitat está realizando una ofensiva internacional para explicar sus razones del separatismo" y ha defendido "que el Gobierno tiene el derecho de explicar las suyas". "Mi misión es defender la unidad de España, que es el bien primero, pero también defender los derechos de los catalanes y de aquellos que han sido engañados en los argumentos, pues no habría reconocimiento internacional, ni ingreso en la UE, y eso se traduciría a una disminución del bienestar de todos", ha aseverado.

Después de todas estas consideraciones, ha asegurado también que se tienen que "construir puentes" con las autoridades de Catalunya y que "se tienen que resolver muchas cosas" como "el sistema de financiación que ha sido profundamente injusto, no sólo para Catalunya sino también para otras comunidades autónomas, como la valenciana". García-Margallo ha afirmado que lo que se explica en esta carta "es una cosa que a mí me gustaría que llegara a la ciudadanía".

Tranquilizar la comunidad internacional

El ministro en funciones visita Italia para una serie de reuniones después de que el domingo formara parte de la delegación española que asistió a la canonización de la madre Teresa de Calcuta en el Vaticano. Esta noche, tiene previsto tratar estos asuntos con su homólogo italiano, Paolo Gentiloni, durante una cena.

Su objetivo en estas reuniones, ha afirmado, es "tranquilizar la comunidad internacional, la comunidad económica internacional de la situación de España a pesar de la situación excepcional" que vive el país. "Tenemos un presupuesto aprobado, la economía española afronta los próximos años en una situación de infinita mayor estabilidad que la que teníamos en el pasado. Somos el país que más crece en la Unión Europea (UE) y que crea más empleo. El desequilibrio externo y público están hasta cierta medida controlados", ha explicado.

Sin embargo, ha admitido que España "no podrá presentar antes del 15 de octubre unos presupuestos a Europa y tampoco el plan estabilidad para corregir la desviación del déficit", aunque ha señalado que no hay a la vista grandes turbulencias que preocupen.