"Rechazo absoluto a la vulneración de los derechos fundamentales de estos niños". Claros y concisos, madres y padres que forman parte de las escuelas catalanas en qué están escolarizados los hijos e hijas de los presos políticos y exiliados han firmado un "Manifiesto por la libertad" con el objetivo de denunciar la situación que viven los hijos de algunos políticos soberanistas.

Su demanda es contundente: exigir la liberación de los presos a fin de que "estos niños y adolescentes puedan disfrutar de aquello que les corresponde, tal como hacen sus compañeros y compañeras, rodeados de sus padres y madres" porque consideran que "ningún menor en una sociedad avanzada, democrática y que quiera ser justa, se tiene que ver privado poder desarrollarse como persona, lejos de su madre o su padre, por motivos políticos".

Después de recordar que a estos niños les han roto el vínculo más importante de su vida, la compañía y el amor presencial de sus padres; a viajar miles de kilómetros para compartir breves ratos detrás de un cristal frío; a no disfrutar de un beso de buenas noche o una sonrisa de buenos día; a vivir sin las complicidades y gestos íntimos más cotidianos, por el simple hecho de ser hijos e hijas de alguien que se ha comprometido con la democraacia y la libertad", reclaman que "estos menores disfruten plenamente de su infancia y de sus derechos".

De momento, este miércoles por la mañana, el manifiesto ya cuenta con más de 9.000 firmas, entre ellas, de escuelas de Sant Vicenç dels Horts, de Sant Cugat del Vallès, de Barcelona o de Gurb. Además, ayer el grupo denominado Grup Pròleg, formado por nombres como Joan Coscubiela, Raimon Obiols o Lluís Rabell, publicaron un manifiesto donde piden la liberación de los presos políticos catalanes.