Unas 500 personas se han manifestado este sábado en Barcelona en apoyo a Open Arms y "en contra de la criminalización y la persecución de las organizaciones que luchan para salvar vidas en el mar" Mediterráneo, como Open Arms y Sea Watch, bajo el lema 'Antes presos que cómplices'.

En la manifestación, que ha comenzado a las seis ante el Consulado italiano en Barcelona, en la calle Mallorca, y ha avanzado por Pau Claris y Via Laietana hasta llegar al Port Vell, se han oído proclamas como 'No más muertos en el Mediterráneo', 'Migrar es un derecho, rescatar una obligación', 'Unión Europa, racista y asesina' y 'Ninguna persona es ilegal'.

Los asistentes han llevado una lancha llena de chalecos salvavidas y unos muñecos con caretas del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y del ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, así como una bandera de la Unión Europea manchada de sangre.

El coordinador de operaciones de la fundación Open Arms, Gerard Canals, ha explicado que la protesta quiere poner de manifiesto lo que está sucediendo con los barcos de salvamento humanitario y ha criticado que les están poniendo "todos los palos en las ruedas"."Nos están atacando por medios de comunicación, por vía judicial y por vía administrativa", ha criticado. Además, que ha reprochado que el Gobierno central hace un año acogiera el barco Aquarius y ahora amenaza, ha dicho textualmente, con una multa de hasta 901.000 euros.

Han participado en la marcha junto a Open Arms entidades como Dunia Katos, Amnistia Internacional, Stop Mare Mortum, Asociación Guaymuras Intercultural, Obrim Fronteres, Mujeres Palante, SOS Refugiados, Facultat de Nàutica de Barcelona, Aucoop y Centro de Cooperación al Desarrollo de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC).