Contra Altsasu. Vox ha congregado a algunos centenares de manifestantes en Madrid para dirigir una nueva ofensiva, esta vez contra una obra de teatro que se estrena a la capital española y que lleva por nombre 'Altsasu'. La muestra artística trata precisamente sobre la polémica escena vivida en el 2016 en el pueblo navarro que lleva el mismo nombre. Es una ficción basada en la pelea entre unos jóvenes de este pueblo vasco con agentes de la guardia civil que no estaban de servicio. Los hechos acabaron con los jóvenes fueron procesados y sentenciados a varios años de prisión, acusados de terrorismo.

Vox anunció el martes que se organizaría para intentar reventar el estreno de la obra de teatro y convocó una concentración ante el Teatro de la Abadía. La convocatoria se justificaba para defender "la dignidad de la Guardia Civil y contra el blanqueo del terrorismo". "Únete contra la obra de teatro 'Altsasu'", concluía el partido de extrema derecha en su llamamiento.

La convocatoria no ha sido muy exitosa y la obra se ha podido estrenar igualmente. De hecho, ya no quedan entradas para ninguna de las once funciones en que hay programadas hasta finales de mes, ya que todas están agotadas. La obra acumula ya cerca de 70 funciones en España y otros países desde que se estrenó en el 2021.

A la concentración han participado figuras notables del partido, como el portavoz municipal, Javier Ortega Smith, y la diputada regional Rocío Monasterio. Se han oído cánticos contra la obra teatral y el PSOE. Ortega Smith ha tomado la palabra. "Nadie apelaría a la libertad de expresión si la obra de teatro fuera fascista o que se ría de las víctimas del Holocausto, porque es algo que genera odio. Nosotros mismos nunca daríamos apoyo a una obra que criminalice los homosexuales, los negros o los gitanos. La libertad de expresión es un derecho que tiene límites, no todo es aceptable", ha argumentado.

También ha habido mensajes contra la Comunidad de Madrid, gobernada por el PP con Isabel Díaz Ayuso al frente. El gobierno regional ha intentado mantenerse al margen de la polémica, remarcando que el Teatro de la Abadía no forma parte de la red de teatros propiedad de la administración regional. De hecho, el consejero de Cultura, Mariano de Paco, ha asegurado que su gobierno "está del lado de las víctimas del terrorismo y de los cuerpos de seguridad del Estado", pero ha dicho que no se tiene que tener miedo a la libertad de expresión.