La Flama del Canigó ha llegado hoy excepcionalmente a las ciudades europeas donde residen los políticos exiliados. En concreto, la llama ha llegado hasta Bruselas, Hamburgo, Edimburgo y Ginebra.

El presidente en el exilio, Carles Puigdemont, ha recibido la llama en un acto cerca del río Elba, en la ciudad alemana de Hamburgo. Rodeado de decenas de personas y esteladas, el presidente lo ha acogido de la mano de Òmnium Cultural. "Siempre mantendremos encendida la llama de nuestra libertad", ha señalado Puigdemont.

Además, la Flama del Canigó también ha llegado de manera excepcional a la capital de Bélgica, en Bruselas, donde lo esperaban los consellers Lluís Puig, Meritxell Serret y Toni Comín.

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Quien también ha recibido la llama ha sido la consellera Clara Ponsatí, exiliada en Edimburgo, Escocia.

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Finalmente, la Flama del Canigó también ha llegado este año a Ginebra, donde lo esperaba la líder de la CUP Anna Gabriel.