La senadora de ERC Laura Castel forma parte de la delegación española en la Asamblea Parlamentaría del Consejo de Europa y tuvo que replicar ayer a los argumentos y las enmiendas de sus compañeros en contra del contundente informe del socialista letón Boriss Cilevics sobre los presos políticos catalanes.

Asegura que estaban convencidos de que el informe conseguiría ser aprobado aunque la libertad de voto en la Asamblea y las presiones españolas provocaban dudas. "España ha hecho muchísimas presiones, lo sabemos a ciencia cierta y nos ha llegado por varias fuentes, y no sabíamos hasta dónde podían tumbar enmiendas o la resolución", explica la senadora.

 

Fuera de la vía principal

Castel considera que la resolución aprobada por el Consejo de Europa, donde se reclama la puesta en libertad de los presos políticos y acabar con la persecución de los exiliados, allana el camino de la negociación y el diálogo y envía un mensaje a la justicia española: "Le está diciendo que está fuera de la vía principal".

En opinión de la senadora catalana, el tono y la contundencia de los parlamentarios españoles que intervinieron en el debate ha servido para que sus colegas de otros países hayan visto "en primera persona qué es España y cuáles son sus representantes políticos y cuál es su cultura política". "Ha posicionado los dos relatos, que nosotros hablamos de democracia, de referéndum, de votar y de negociación y ellos de sentencias punitivas. Son dos culturas diferentes", subraya.

 

En la imagen principal, la senadora de ERC Laura Castel / M.L.