Hay capítulos que se hacen difíciles de cerrar y las licencias por edad, que permiten a trabajadores cobrar sin ir a trabajar en los últimos años de la vida laboral, es uno de ellos. El pasado mes de febrero todos los grupos llegaron a dos acuerdos. El primero, eliminarlo del Régimen Interno del Parlament para siempre. El segundo, darse de plazo hasta el 1 de abril para gestionar la situación de las personas que lo disfrutan en la actualidad y de las que lo tienen concedido pero todavía no lo disfrutan. La primera cuestión se llevó a cabo, pero la segunda a dos días para vencer el plazo, no está solucionada y ahora los grupos han acordado alargar el plazo hasta el 17 de junio.

Así lo han decidido la Mesa y la Mesa ampliada celebradas este martes, dando dos meses y medio más de margen a la negociación con el Consejo Personal, a pesar de no sea un requisito imprescindible, según avalan los informes de los letrados. Los grupos pero argumentan que se ha priorizado la negociación colectiva. Así pues a estas alturas hay 21 personas que están disfrutando este privilegio mientras que hay 12 que lo tienen concedido pero que todavía no lo disfrutan. Este jueves la Comisión de Asuntos Institucionales (CAI) ratificará el nuevo calendario. Según han explicado fuentes de la Mesa, durante el periodo transitorio hasta que haya una decisión final se suspenden las licencias por edad que se tenían que empezar a aplicar en las próximas semanas.

Todavía no se ha abierto la negociación

En la Mesa de la semana pasada los grupos aseguraron a los periodistas que estaban trabajando en base a informes y que estaban convencidos de que encontrarían una solución antes del 1 de abril. A pesar de eso ahora han reconocido que se les ha tirado el tiempo encima y que todavía no han abierto formalmente la negociación con los trabajadores. El secretario primero de la Mesa, Ferran Pedret, y la secretaria segunda, Aurora Madaula, serán los miembros encargados del área de personal y, por lo tanto, los que estarán más al corriente del proceso de negociación aunque no tienen por qué asistir a todas las reuniones.

La Mesa no ha explicado cuál es la propuesta inicial que plantearán a los trabajadores. El informe jurídico firmado por el letrado Antoni Bayona, encargado por la Mesa, abre la puerta a retirar las licencias por edad a los que ya no van a trabajar en el Parlament. Argumenta que el "principio de irretroactividad sólo garantiza las percepciones recibidas por los beneficiarios de las licencias por edad pero no se proyecta sobre el derecho a mantener las condiciones de la licencia de cara al futuro cuando se ha producido un cambio normativo". También hay otro informe, firmado por el letrado Ferran Domínguez, que sólo habla del caso de los 12 trabajadores que pidieron la licencia por edad en el 2021 y que todavía no se los aplica.

Sea como sea, y a pesar de fuentes parlamentarias han asegurado que eso no condiciona su decisión, a finales de febrero se conoció que el personal del Parlament se dirigió a un despacho de abogados, el Colectivo Ronda, para adoptar acciones legales contra la cámara por la decisión de revocar las licencias por edad. En un comunicado para explicarlo, argumentaron que con la decisión de suprimir las licencias "se transforma en papel mojado el principio de negociación colectiva y el derecho de la libertad sindical".