La Candidatura d'Unitat Popular (CUP) culmina este sábado su campaña 'Sense por' de apoyo a los cargos electos independentistas perseguidos por la justicia española. Esta manifestación nacional que tendrá lugar en la plaza Universitat de Barcelona (17h), llega después de que la formación anticapitalista haya organizado durante las últimas semanas, desde el 27 de abril, hasta una veintena de asambleas abiertas por toda Catalunya con el fin de explicar la campaña, y sin duda movilizar a sus bases para este acto que será un claro gesto de fuerza y desobediencia

Precisamente, la campaña nace básicamente porque varios alcaldes de la CUP están siendo investigados por no descolgar la bandera estelada de sus consistorios, como la alcaldesa de Berga, Montserrat Venturós, que incluso se negó a declarar, y Joan Coma, concejal de Capgirem Vic, que está siendo investigado por la Audiencia Nacional por un presunto delito de sedición por haber expresado en un pleno que hay que desobedecer a los tribunales españoles.

De hecho, es el primer concejal imputado por el procés y ya se celebró una primera manifestación en Vic en su apoyo. Sin embargo, según denuncia la CUP, hay 291 ayuntamientos han sido requeridos por la Audiencia Nacional en el marco de una "campaña de persecución" por haber aprobado mociones de apoyo a la declaración independentista del 9-N, aprobada por el Parlament y suspendida por el Tribunal Constitucional. 

De hecho, la CUP ha hecho público esta misma semana un manifiesto en apoyo a la movilización de este sábado, que cuenta ya con más de un centenar de adhesiones, entre las cuales hay las del diputado de JxSí Lluís Llach y el exvicepresidente y exlíder de ERC Josep-Lluís Carod-Rovira.

El documento, publicado bajo el título "Per les llibertats avancem, que cap tribunal ens faci callar", tiene como objetivo alertar a los catalanes de "la voluntad del Estado de atemorizarnos, empezando por nuestros representantes democráticos", a la vez que hace un llamamiento a participar de la manifestación de esta tarde. La CUP denuncia en el manifiesto "persecución de ideas". En este sentido, los anticapitalistas apuntan que "la sociedad catalana no tiene miedo de ninguna amenaza judicial ni de ningún tribunal de excepción".

Òmnium y ERC se añaden

Entre las adhesiones a la manifestación destacan las de Òmnium Cultural, con su presidente, Jordi Cuixart, en la cabecera de la marcha, y la de ERC, que enviará una delegación formada, entre otros, por los diputados al Congreso Joan Tardà y Ana Surra, y el líder en Barcelona, Alfred Bosch.