La justicia escocesa ha dejado en libertad esta tarde a la consellera Clara Ponsatí, y le mantiene el pasaporte, con lo que puede viajar libremente.No le han impuesto tampoco ninguna fianza.

Ponsatí se ha presentado esta mañana ante el juez, y tendrá que comparecer otra vez el 12 de diciembre, cuando se celebre la vista.

El Tribunal del Sheriff de Edimburgo ha aceptado la petición del abogado defensor, Aamer Anwar, de dejar Ponsatí libre mientras dure el procedimiento judicial. Está acusada por España de los cargos de sedición y malversación de fondos por el referéndum del 1-O.

"Hemos ganado la batalla pero no la guerra, queda un largo camino", ha afirmado Ponsatí, según recoge la cuenta de Twitter de su abogado. También ha pedido que se realicen donaciones a una página digital de micromecenazgo para financiar el proceso judicial, que ya cuenta con más de 50.000 libras de un objetivo de 100.000 (unos 117.000 euros, a cambio de hoy).

 
La consellera, de 62 años de edad, se ha entregado esta mañana en una comisaría de Edimburgo, para hacer la vista inicial. El abogado ha dicho antes de entrar que la petición de España "es un abuso del procés de extradición y de la euroorden" y ha señalado que la sedición "es un delito del siglo XVI" que "por suerte en Escocia se abolió hace mucho tiempo".

Las autoridades británicas aceptaron inicialmente la orden de arresto emitida por el Tribunal Supremo español sólo después de que el juez Pablo Llarena ofreció una serie de aclaraciones, ya que la primera versión era "vaga" y presentaba "contradicciones", según ha recordado Anwar.

 

El abogado de Ponsatí ha cargado contra la acusación de sedición que hace el juez Pablo Larena. "El delito de sedición fue creado el siglo XVI por reyes y reinas con la finalidad de detener la reacción de la gente común que quería defender sus derechos", ha insistido a la prensa.

La BBC se ha hecho eco de la decisión del Tribunal de Edimburgo. Ha recordado que en Escocia el delito de sedición fue abolido hace mucho tiempo, según el abogado.

Cuando se exilió, Ponsatí estuvo unos meses en Bélgica al lado del president Carles Puigdemont y otros consellers de Govern catalán y, en marzo de 2018, se reincorporó a su plaza en la Universidad de Saint Andrews en Escocia.