Los presos políticos y el debate sobre la separación de poderes han vuelto a centrar el tercero y último debate entre candidato al 21-D, que se ha celebrado en TV3. En esta ocasión, Junts per Catalunya e Esquerra han cerrado filas para reprochar al unionismo los encarcelamientos y la reacción represiva del estado español hacia el proceso.

El debate ha empezado bien encendido con un fuego cruzado entre las candidaturas de los presos y el Partido Popular. En este sentido, se han enfrentado el conseller y número cuatro de Junts pel Sí, Jordi Turull y la número dos de ERC, Marta Rovira, con el candidato del PP, Xavier Garcia Albiol.

La republicana ha salido a la defensiva para criticar una falta de separación de poderes a España y el hecho de que haya presos políticos, y ha argumentado su tesis recordando las palabras de la vicepresidenta española, Soraya Saenz de Santamaría, que este sábado presumió de haber decapitado a los líderes independentistas. "No se lo permito", ha lanzado Rovira a Albiol, que se vanagloriaba de tener una gran democracia y una grande separaciones de poderes.

"Mi libertad provisional no me permite explicarme cómo querría", ha reivindicado Turull, denunciando su situación judicial personal, y también la del resto de consellers y los Jordis, y donando por hecho que si pudiera criticaría también duramente la justicia española. "No le ha puesto en la prisión el señor Rajoy", ha asegurado Albiol dirigiéndose a Turull, a lo que Rovira ha saltado y ha dicho: "¡No poco! Ha sido un golpe de estado".

Las críticas, sin embargo, no han sido sólo para PP y Ciutadans, Turull también ha reprochado su actitud al candidato del PSC, Miquel Iceta, a quien le ha reclamado "menos indultos y más democracia". En este sentido, el candidato de Junts per Catalunya, ha asegurado que "no he cometido ningún delito y pienso demostrarlo", reprochando al candidato socialista que prometiera un indulto, cuando los miembros del Govern todavía no han sido juzgados ni condenados.

"Deje de hablar en nombre de Oriol"

Otro de los puntos más encendidos del debate, que se ha celebrado a menos de 24 horas del cierre de campaña, ha sido cuando Arrimadas ha apelado directamente al candidato de ERC, Oriol Junqueras, en prisión preventiva desde el pasado 2 de noviembre. Ha sido después de que Turull defendiera la restitución de Carles Puigdemont como presidente de la Generalitat, una propuesta a la que Esquerra de momento se resiste y reivindica que si ganan el candidato a la investidura tendría que ser el presidenciable de ERC.

"Ni el señor Junqueras se lo compra", le ha tirado en cara Arrimadas a Turull. "Deje de hablar en nombre de Oriol", ha reclamado Rovira, que poco antes había recordado que ni ella misma puede hablar casi con el candidato y ha pedido "un poco de respeto".

Además, los dos grandes partidos independentistas han cerrado filas para rebatir algunos de los argumentos de los unionistas, que los acusaban de haber "arruinado a los catalanes" o haber "dividido" a la sociedad. En este sentido, Turull ha criticado a Arrimadas, a quien ha acusado de debatir a golpe de titular pero sin contenido ni datos que lo sustenten.

Candidatos 21D debate TV3 - Sergi Alcàzar

Sergi Alcàzar

También en este bloque, Albiol ha instado a los independentistas a decir qué medidas positivas ha habido para los ciudadano por el proceso, a lo que Rovira ha exhibiendo la obra de Govern de los últimos dos años, tanto en materia económica y financiera como en lo social.

La CUP reclama la unilateralidad

En la primera parte del debate, que ha versado básicamente sobre como se ha llegado hasta aquí con el proceso soberanista, se han puesto en evidencia los grandes bloques, independentistas y unionistas, y se ha optado por no entrar en el cuerpo en cuerpo con los rivales del mismo bloque. Una estrategia que no se ha mantenido tanto en las otras partes del debate, especialmente en el de pactos post-electorales.

Aquí, los indultos y los posibles pactos resquebrajan el bloque del 155, pero también han dividido el bloque independentista, después de que la CUP haya vuelto a reivindicar la necesidad de actuar unilateralmente. Así, los cupaires han apelado a los republicanos a decir "¿de qué quieren ir a hablar con Madrid"? viendo cómo han actuado hasta ahora para detener el proceso, y asegurando que ellos les esperarán aquí porque "tendrán poco a hablar" en la capital española. El candidato de la CUP, Carles Riera, ha defendiendo que están dispuestos a formar parte de un Govern que quiera desplegar la República, pero ha dejado claro que no cuenten con ellos para gobernar en el autonomismo. "Si es para aceptar el 155 y bajar la cabeza, no cuenten". ha defendido.

Finalmente, Junts per Catalunya ha vuelto a defender su principal propuesta de campaña, y ha apostado para que se reinvista a Carles Puigdemont como presidente: "estas elecciones van de que vuelva el 130º presidente y su Govern o que entre en el Palau el 155". En este sentido, ha asegurado que la victoria del presidente y su investidura sería la manera de decir a Rajoy que no puede poner y sacar a los presidentes catalanes cuando quiera, porque, se ha preguntado, "si han fulminado al presidente una vez quién dice que no lo harán dos veces"?.

Esquerra, por su parte, ha evitado entrar a debatir quién tiene que ser el presidente después de las elecciones y se ha centrado al rebatir los argumentos del unionismo reprochandoles la represión y los encarcelamientos, y en hacer visibles sus propuestas de Govern.