La independencia de Catalunya vendrá de una negociación multilateral con el Gobierno español, las instituciones internacionales y unos mercados que se convencerán que esa es la mejor situación para el retorno de la deuda. Una Catalunya independiente es un deudor "más fiable" que una "dependiente de un Reino de España que gestiona mal los recursos públicos". Estos son el escenario y el argumento del presidente de ERC, Oriol Junqueras, próximo vicepresidente y conseller de Economia de la Generalitat.

Junqueras ha insisitido este miércoles en RAC1 que la "partida" de la independencia "no la jugamos solos. Hay otros jugadores, entre ellos los mercados financieros que tienen deuda de España", a los cuales intentará convencer de que la independencia es el mejor negocio que pueden hacer.

"La sociedad catalana está en condiciones de pagar lo que ya paga y de responder a una deuda que no ha generado", ha añadido.

La presión de la deuda

El inminente responsable del área económica del ejecutivo catalán cree que si el Gobierno español "no quiere negociar nada, una parte lo puede obligar" a hacerlo, recordando que "la inmutable Constitución española la cambiaron en 12 horas en una noche de agosto" para satisfacer los mercados financieros y bajo presión de la Unión Europea.

"Eso quiere decir que hay agentes en el ámbito multilateral y mundial que tienen capacidad de negociación clara con el Gobierno español, casi de dictado, y por lo tanto esta negociación se producirá, de forma explícita o implícita, abierta o cerrada, pero se producirá", ha concluido Junqueras.

En este sentido, "es muy importante que nuestra actitud sea de estar dispuestos a reconocer una parte de la deuda pública de España", parte que ha cifrado en unos 240.000 millones de euros, y a "dar garantías que nosotros responderemos con más seguridad de la que puede hacerlo el Estado español".

Consenso y movilización

Para poder ejercer la independencia, Catalunya necesita crear unas "estructuras mínimas", como la Agencia Tributaria o la Agencia de la Seguridad Social.

La oposición del Estado español –con "unos instrumentos muy consolidados"– se puede compensar "a través del consenso político, social y un nivel máximo de movilización", según Junqueras.

Ha reconocido, no obstante, que este año "puede ser que el pago de impuestos se haga como hasta ahora". Desde su departamento "intentaremos tenerlo todo a punto para que se pueda hacer de otra manera", ha prometido.

En la actualidad, "el 95% de los impuestos de los catalanes los cobra el Estado español. La Generalitat controla menos del 5% de los impuestos y con eso no puede hacer frente al 100% de los gastos de las instituciones catalanas".

En este sentido y en referencia al Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), ha dicho que "hemos pagado 1.900 millones de intereses de una deuda que no existiría si en lugar de darnos crédito con nuestros impuestos nos los devolvieran porque son nuestros. Esa cifra [los 1.900 millones] es aproximadamente seis veces el plan de choque social; habríamos podido financiar seis planes como ese".

Junqueras ha querido también tranquilizar a los funcionarios sobre las medidas que pueda adoptar el nuevo Govern: "si alguien tiene miedo, ya puede dejar de tenerlo".