El presidente de Esquerra Republicana, Oriol Junqueras, afirma que el apoyo a los Presupuestos del Estado "está condicionado a los avances en la mesa de diálogo. Vamos paso a paso" y cree que el PSOE solo negocia cuando lo exigen las circunstancias.

En una entrevista concedida al diario El País, Junqueras señala que ERC permitió la investidura de Pedro Sánchez "porque la alternativa, un Gobierno del PP y Vox, era mucho peor" y se muestra convencido de que "si nosotros y el PSOE hacemos las cosas bien, la extrema derecha tendrá poco espacio". 

Además, el líder republicano ha sido muy expresivo a la hora de negar que se engañara a los catalanes prometiendo una independencia imposible: "Y una mierda. Y una puta mierda. Dijimos la verdad: que el procés tenía que acabar en la independencia. Eso se impidió con palizas, cárcel, destituyendo Gobiernos y cerrando Parlamentos", ha recalcado Junqueras. Para el líder republicano "el objetivo era y es la independencia. Y caerá por su propio peso: solo hay que trabajar para convencer a más gente". La expresión no ha gustado nada a la ultraderecha mediática.

Gobernabilidad de España

En cuanto al pacto de gobierno, ha asegurado que "la gobernabilidad de España en este momento es bastante estratégica para ERC", asevera. "Nos abstuvimos como habría hecho cualquier demócrata europeo. Dicho esto, los partidos con los que hemos negociado siguen mostrando dosis de inhumanidad alucinantes: saben que somos inocentes y siguen callando", añade, además de denunciar que "los socialistas catalanes han aplaudido la prisión de inocentes".

Muestra su disposición al diálogo con el PSOE porque "vamos a sentarnos a ver si es posible llegar a acuerdos" y matiza que el pasado mes de abril el PSOE "no quiso negociar los Presupuestos. Sánchez eligió ir a elecciones", por lo que "atribuir a ERC esa responsabilidad es impreciso".

El Supremo "no tiene razón en nada"

El líder de ERC dice en la entrevista que el Tribunal Supremo "no tiene razón en nada" y la lección de todo el "procés" es "que lo hicimos para poder volver a hacerlo".

​Reconoce en todo caso que "cualquier proceso complejo tiene que ser necesariamente multilateral. Y en este caso requiere de las instituciones políticas catalanas, españolas, europeas e internacionales, de las empresas privadas, y de tener los suficientes apoyos".