Casi un año después de su aprobación definitiva, buena parte de los líderes políticos del procés independentista y del Govern del 1 de octubre todavía esperan que se les aplique la ley de amnistía, cosa que podría ir para largo. Entre los afectados está el presidente Carles Puigdemont, en el exilio, y también quién era su vicepresident en el Ejecutivo que organizó y celebró el referéndum y también presidente de Esquerra Republicana, Oriol Junqueras. Este miércoles, en una entrevista en Catalunya Ràdio, el líder republicano ha sido cuestionado por el pleno del Tribunal Constitucional previsto para la semana de Sant Joan, en que este debatirá si avala o no la ley de amnistía. Aunque está previsto que el TC rechace el recurso del PP (hay una mayoría progresista de 6 en 4), Junqueras ha hecho un llamamiento a la prudencia y al escepticismo.

"La experiencia nos señala que tenemos que practicar un sano escepticismo. Hemos visto de todo", ha manifestado, recordando que el Tribunal Supremo se "inventó" nunca el delito de "malversación por pensamiento"."Hem visto cosas alucinantes, contrarias a los principios generales de los derechos. Ya lo veremos. Es posible que ni siquiera los protagonistas de las decisiones sepan qué decisiones toman", ha añadido el presidente de ERC, que mientras no se le aplique la ley de amnistía, continúa inhabilitado hasta el 2031, y, por lo tanto, ahora mismo no se podría presentar a unas elecciones en el Parlament de Catalunya. Preguntado por si tiene más ganas de volver a ser profesor universitario (ahora no puede ejercer) o ser president de la Generalitat ha resuelto que no son cosas excluyentes.

¿Avances en la financiación singular?

Salvador Illa llegó a la presidencia de la Generalitat en agosto del 2024 con el apoyo de ERC avalado por la militancia en una ajustada votación (Junqueras nunca ha revelado que votó en esta consulta) y a cambio, sobre todo de un nuevo modelo de financiación para Catalunya. En este sentido, el pacto especificable que se tenía que presentar una propuesta dentro del primer semestre del 2025, es decir, antes de que acabe el próximo mes de junio. "Queda un mes y medio", ha insistido Junqueras, en que ha reconocido que es menos escéptico con este tema que con la aplicación de la amnistía. "El PSOE y el Gobierno están haciendo más que en marzo. La discreción ayuda a poder negociar con mejores condiciones", ha añadido. Si este año el Gobierno de Salvador Illa se quedó sin presupuestos, Junqueras ha ido advirtiendo que si no hay avances en el nuevo modelo y también en el traspaso de Rodalies, tampoco habrá para el 2026. En cambio, si se adelanta, "habrá una mejor predisposición a hablar de nuevos temas", como pueden ser los presupuestos.