A la sentencia del 1-O se tiene que llegar con "unidad estratégica" de los que defienden los derechos y libertades. Así lo ha asegurado el president Quim Torra este miércoles desde Madrid, en una declaración institucional desde el Centro Cultural Blanquerna después de la última sesión del juicio al procés. "Mañana el tribunal empezará a redactar la sentencia", ha asegurado al jefe del Govern. "Sólo es responsabilidad nuestro que nos ponemos a redactar el futuro libre de Catalunya", ha remachado.

Después de asistir a la última sesión del Tribunal Supremo, y ante los que "puedan dudar de la determinación" de su ejecutivo, Torra se ha comprometido a construir la unidad del soberanismo. Y ha dejado claro cuál es su objetivo: "Sabed que mi compromiso ha sido y es trabajar desde el primer momento para que Catalunya se convierta en un estado independiente. Ahora es la hora del país". Ha dirigido el llamamiento unitario a dirigentes políticos y civiles, a su Govern y a los grupos parlamentarios.

"La sentencia será también un mensaje a los más de dos millones de catalanes que votaron el 1-O", ha asegurado el president de la Generalitat, que en este sentido ha añadido que "la respuesta a la sentencia no puede ser ninguna más que la afirmación de un derecho que no pertenece a un presidente, sino a todo un pueblo".

En este contexto, Torra ha pedido "dejar de lado las diferencias legítimas que podemos tener" para "unirnos por un sentido de libertad, fraternidad y justicia". Y ha desarrollado: "Ahora es la hora de la unidad estratégica, de compartir un horizonte y un rumbo. Esta es nuestra responsabilidad, de intentar hasta el último aliento el entendimiento de los defensores de las libertades y los derechos civiles y políticos".

En un discurso también en inglés y castellano, el jefe del Govern ha recordado el informe del grupo de trabajo de la ONU que pide la liberación de los presos políticos. "España está violando el derecho internacional y lo denunciaremos", ha avisado, dirigiéndose también al Gobierno de Pedro Sánchez. Ha recordado el recorrido previo de la causa fuera de España: "Los tribunales europeos también dejaron claro que no había ni siquiera indicios de rebelión y sedición y España retiró las peticiones de extradición del president Puigdemont y el resto de exiliados políticos".

Después del "juicio farsa", el president de la Generalitat ha defendido que "hoy más que nunca, ante la vulneración de derechos, la independencia de Catalunya es una causa justa".

"El procés hacia la independencia empezó en el 2010 con una sentencia", ha recordado Torra, que ha remachado que "ahora puede culminar también con una sentencia". Y ha concluido su declaración parafraseando la última palabra de Jordi Cuixart: "Yo también estoy convencido de que lo volveremos a hacer".