La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, se ha dirigido a través de una carta a los líderes de la Comisión Europea, el Parlamento Europeo y el Consejo Europeo para alertarlos sobre la "preocupación" con la cual tanto ella como el Ayuntamiento viven el juicio al proceso que empezará el 12 de febrero. "La celebración de este juicio representa el fracaso de la política, entendida como espacio de diálogo y de negociación", apunta Colau en la carta dirigida a Jean-Claude Juncker, Antonio Tajani y Donald Tusk.

La alcaldesa defiende que las "consecuencias" del juicio al proceso son de "interés para el conjunto de las instituciones europeas" y que, por lo tanto, no se trata "sólo de un asunto interno del Estado español". Es por este motivo que Colau ha comunicado a los dirigentes europeos que ha invitado miembros de la Eurocámara el 20 de febrero para hacer el "seguimiento del juicio".

Colau expresa a los líderes de las instituciones europeas en la carta que el juicio del 1-O es una "situación anómala" en la UE, tanto con respecto a la "condición política de las personas encausadas" como por los "delitos graves" de los cuales se les acusa, que apunta que pueden llegar hasta los 74 años de prisión.

La alcaldesa señala que, a pesar de ser una persona "no independentista" que "no comparte muchas de las decisiones que llevó a cabo el anterior Govern", la "delegación de la solución de un problema eminentemente político a instancias judiciales" no contribuye a "reconducir el problema de encaje de Catalunya dentro de España", sino que "reforzará la polarización y difícilmente servirá para construir una salida negociada".

Una vulneración de derechos

"Considero que la prisión provisional supone una vulneración del derecho de las personas encausadas a preparar una defensa efectiva, y que los delitos que se imputan son absolutamente desproporcionados", denuncia Colau al considerar que "en ningún caso se motivaron situaciones de violencia por parte de la población o el Govern".

La alcaldesa recuerda que así también lo han reconocido varios tribunales de países europeos. "No se nos escapa pues que estamos ante un conflicto político y que la mejor manera de abordarlo es a través de la vía del diálogo recientemente iniciada", defensa.

Colau alerta en la carta que las consecuencias del juicio afectan "la estabilidad política" de la UE, especialmente en "un momento en que esta se encuentra amenazada por los nuevos populismos xenófobos". Según señala la alcaldesa, el juicio del 1-O también compromete "el pleno reconocimiento de los derechos humanos y las libertades democráticas que durante 62 años han sido el faro que ha permitido la construcción de la Unión Europea".

Vox difunde "su ideario de odio"

Además, la alcaldesa avisa a los líderes de la Unión Europea que "un partido de extrema derecha", en referencia a Vox, está haciendo un "ejercicio de que podría ser fraudulento de la acusación popular utilizando el juicio como altavoz para difundir su ideario de odio" para "obtener un rédito electoralista".

La alcaldesa de Barcelona también ha trasladado a Juncker, Tajani y Tusk la declaración institucional del pleno de Barcelona que pide un juicio "justo" e "imparcial" para los líderes independentistas, en el cual "se reconozcan plenas garantías procesales".

La declaración institucional del pleno del 25 de enero también reclama la "libertad de los encausados actualmente en prisión provisional a fin de que se puedan preparar sus defensas", así como que "se facilite la tarea desarrollada por los observadores internacional".