Días importantes y claves para Begoña Gómez, mujer del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para quien este lunes el fiscal pedía archivar la causa por las acusaciones de supuesta corrupción en el sector privado, tráfico de influencias, apropiación indebida e intrusismo. Esta petición es contraria a la opinión del juez Juan Carlos Peinado, que la semana pasada decía que consideraba "fundamental" esta relación para los hechos que se investigan. Begoña no es la única en el punto de mira del juez Peinado, quien, según El Confidencial, ha presentado una querella contra el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián.

El juez acusa al dirigente independentista de un delito de injurias y le pide una indemnización de 70.000 euros. Juan Carlos Peinado fundamenta estas injurias en al menos dos declaraciones de Rufián donde habría dicho que el juez trabaja para el PP y lo habría acusado de prevaricar en el caso que afecta a Begoña Gómez. 

Rufián no es el único político contra quien Peinado ha iniciado acciones legales, y es que el Juzgado de Primera Instancia número 89 de Madrid ya ha citado al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, el próximo 29 de octubre a las 11 h. En la cita estarán él y el juez Peinado, y se encontrarán para el habitual acto de conciliación con el que se da comienzo a las diligencias.

Rectificación pública y disculpa

La querella contra Rufián a la que ha tenido acceso el citado diario digital también se ha presentado en el Juzgado de Primera Instancia de Madrid, y exige al dirigente de ERC una rectificación pública y una disculpa. Estas exigencias, según el texto de la querella, podrían ser "mediante una comparecencia institucional o bien una nota de prensa". Peinado quiere que Rufián admita que no es cierto decir que ha prevaricado, ni ha actuado de manera arbitraria, ni que trabaje para el PP. Además, Peinado exige que diga que sus actuaciones no "obedecen a consignas partidistas o intereses políticos espurios".

La primera de las intervenciones de Rufián que denuncia el juez se produjo el 22 de noviembre de 2024, cuando el político criticó una decisión del juez, asegurando que algunos magistrados “prevarican directamente” y haciendo referencia a la investigación contra Begoña Gómez por presunto tráfico de influencias vinculado a su relación matrimonial con el presidente del Gobierno. Rufián calificó el procedimiento de “despropósito” y remarcó que no eran solo sus palabras, sino las de expertos en derecho.

El 25 de septiembre de 2025, Rufián continuó denunciando el error del juez Peinado al relatar que Gómez había conocido a su asesora en un tanatorio, cuando en realidad murió su padre. Según él, la instrucción forma parte de una ofensiva de una fracción del Poder Judicial, influenciada por el expresidente Aznar, contra determinados partidos e ideas, y criticó al PSOE por “repartir” los jueces con el PP. La tensión ha llevado a Peinado a pasar al ataque. El juez también ha presentado demandas de conciliación por injurias y calumnias contra políticos y periodistas, incluyendo a Rufián, el ministro Óscar Puente y profesionales como Antón Losada y Ernesto Ekaizer.