Juan Carlos I ha vuelto a salir de caza. Este martes apareció por sorpresa una estatua de dimensiones medias del rey emérito apuntando con un rifle de caza a la emblemática estatua del Oso y el Madroño, situada en la plaza de la Puerta del Sol, en Madrid. La obra, creada por el artista chileno, Nicolás Miranda, se ha instalado sin autorización municipal y se enmarca en su última producción, que lleva por título 'Estrategias parasitarias para la supervivencia en un mundo cruel'.

La escultura tiene una altura de 1,70 metros, contando con el pedestal, y está elaborada de poliuretano y masa de modelar, aunque está pintada de color oscuro que simula el metal, un tono muy similar a la del Oso y el Madroño. Solo colocarla en la plaza ya despertó la atención de los madrileños y de los turistas que paseaban por la zona, y atrajo todos los focos. El destino definitivo de la obra es una exposición del artista en el centro cultural La Parcería, en Arganzuela (Madrid), a partir del 4 de mayo.

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La estatua del rey Juan Carlos I apuntando al Oso y el Madroño, en la Puerta del Sol / Europa Press
estatua Juan Carlos I madrid
La estatua del rey emérito con un rifle en la mano en la Puerta del Sol de Madrid / Europa Press

¿El objetivo?, ridiculizar a Juan Carlos I

El principal objetivo de la obra es ridiculizar la figura de Juan Carlos I, que desde 2020 huyó a Abu Dabi para evitar los frentes legales que tiene abiertos a España. Con todo, Miranda ha apuntado que "antes de nada cuestiono la visualidad, como sistema combinatorio. Mi operación como artista contemporáneo es parasitaria. Parasito alguna cosa que ya existe. Por ejemplo, el monumento madrileño lo conecto con la monarquía española para hacer una parodia al símbolo de la ciudad. Pero al final todo tiene que ver con el lenguaje visual". El artista, que acostumbra a tirar de ironía y humor en las construcciones, recuerda que el rey emérito ha sido criticado en España "por su lujuriosa vida privada y por su afición a la caza de animales en peligro de extinción como bisontes, elefantes y osos".

Nicolas Miranda con la escultura de Juan Carlos I
El autor de la obra, Nicolás Miranda, con la escultura de Juan Carlos I / Europa Press

Retorno de Juan Carlos I a Abu Dabi

La aparición de esta estatua coincide con la segunda visita del emérito en España, donde ha pasado unos días entre Sanxenxo y Vitoria. Juan Carlos I llegó este martes por la tarde a Abu Dabi en un vuelo privado procedente de Vitoria, que salió en torno a las 11 de la mañana.

El emérito llegó a España el pasado miércoles, en concreto, en el aeropuerto de Vigo, desde donde se trasladó hasta la localidad costera de Sanxenxo. El objetivo principal de su viaje era poder participar en las regatas de la Copa de España, que organiza el club náutico de la localidad donde participa su barco, el Bribón. Finalmente, el emérito solo pudo participar de los entrenamientos el jueves y viernes, pero fue imposible que disputara la competición a consecuencia de las malas condiciones meteorológicas. Después de 5 días en Sanxenxo, voló dirección Vitoria, donde ha sido dos días alojado en la clínica privada del doctor Eduardo Anitua para hacerse una revisión médica rutinaria.