La noticia del día es que no es noticia, si hacemos caso a las portadas impresas de los diarios de Madrid. Mientras la Zarzuela ha aclarado este lunes a todo correr que el saludo entre el rey emérito Juan Carlos I y el príncipe heredero saudí Mohammed Bin Salman fue "estrictamente protocolario y sin trascendencia institucional", y el ministro Josep Borrell ha hecho una finta al tema, en las portadas de estos días no se ha dicho ni mu de la cosa. Hoy tampoco. Ni en El País. Es una manera como cualquier otra de no entrar al trapo. Que no salga humo por la chimenea.

EP

Entretanto, Gibraltar sigue vivo. La herida inglesa escuece. El Mundo y La Razón siguen en ello, con más energía los primeros, que poco a poco van ganando el papel de policía patriótica: este martes también revelan que el manual más común en los institutos de las Baleares explica que existía una Corona de Aragón, capital Barcelona, que dominó el Mediterráneo, etcétera, por lo cual lo consideran (el manual) "repleto de consignas separatistas... con condes convertidos en reyes". Qué escándalo. Habráse visto, convertir a un conde en rey.

Vox también tiene vida en las portadas de los diarios de Madrid –más que el rey emérito. Esos dos hablan de ese partido extraparlamentario directamente. La Razón para decir que Casado divide al partido con su estrategia de ir a por los presuntos votantes de Vox. El Mundo explica el plan: endurecer el discurso en inmigración, seguridad y, ¡tachán!, Gibraltar. En la crónica precisa que el PP defenderá las autonomías y Europa para diferenciarse de Vox.

ME

LR

ABC, en cambio, tiene otra información: el presidente del PP quiere que el gobierno central recupere competencias en Educación, Justicia, Sanidad y Prisiones. No lo relaciona con Vox pero ahí aprieta el zapato. La portada es un póster electoral como una catedral, con sus banderitas y su canesú. Lástima de la sonrisa conejil del protagonista y del pareado del titular –que quizás es deliberado: CasADO y EstADO… no lo descartes.

ABC

En fin. ¿En qué quedamos? ¿El PP defenderá las autonomías o las vaciará de contenido real? ¿Defenderá a Europa o la reprobará por la cuestión del Peñón? La confusión es mayúscula. Después dirán que los partidos extraparlamentarios no tienen fuerza. A Vox le están haciendo la campaña gratis de tanto hablar de ellos, como pasó con Trump, que ganó una primaria tras la otra y las presidenciales con el presupuesto de campaña más bajo de todos. Sólo en las primarias, se calcula que la (mala) prensa que recibió equivalía a 2.000 millones de dólares en publicidad. Vox juega a eso. A río revuelto, ganancia de pescadores.