"La mesa de diálogo no diré que está en vía muerta, pero sí en vía lenta". Estas son las declaraciones que ha hecho en Catalunya Ràdio el secretario general de Junts, Jordi Sànchez, al día siguiente que el president de la Generalitat, Pere Aragonès, pronunciara una conferencia en Madrid con la mesa de negociación como uno de los temas principales. Aragonès emplazó al presidente español, Pedro Sánchez, a llevar "propuestas concretas" a la mesa de diálogo entre el Estado y la Generalitat. "Hay una oportunidad histórica que no se puede desperdiciar", sentenció, y "no habrá segunda oportunidad", porque "si la negociación se bloquea seguiremos adelante".

El dirigente de Junts tiene menos confianza que el president en el diálogo con el Estado, por eso ha dejado claro que Junts "siempre ha sido partidario de que el diálogo y la negociación sean la vía para resolver el conflicto, pero por ahora no vemos las condiciones para un buen final de la mesa de diálogo. El gobierno español no está predispuesto a resolver el conflicto político".

De la misma manera, Jordi Sànchez ha recordado que su formación está dispuesta a participar en la mesa de diálogo siempre y cuando haya "unas mínimas condiciones", como tener la potestad de escoger quien serán sus interlocutores.

"El independentismo no retrocede"

Preguntado sobre si considera que el independentismo está apagado y poco motivado, Jordi Sànchez ha subrayado que "el independentismo como proyecto social no retrocede". "No conozco sectores de la población que hayan sido independentistas y hoy digan que ya no. Quizás sí que las estrategias y los debates están más relajados, pero retroceso a nivel social no", ha aclarado.

Sànchez ha hecho referencia a varios motivos por los que cree que ha podido haber esta pequeña relajación: "El 2017 era la preocupación número 1, hoy ya no. Ningún diario español dedica una pequeña referencia a la conferencia del presidente Aragonès, hace un tiempo no era así. Hay factores como la fatiga de la pandemia que lo justifica".

Precisamente este pasado lunes, la presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, se expresaba con contundencia: la mesa es una retirada de las victorias alcanzadas el 1 y el 3 de octubre. En un mensaje emitido a través de las redes sociales, la líder de la entidad independentista dijo que, con el único fruto de los indultos de los presos políticos, se ha intentado volver a una falsa normalidad, "una especie de pacto de estabilidad con mesas de diálogo inoperantes" que para Catalunya solo significan continuar la retirada después de la victoria del referéndum del 2017.

La conferencia de Aragonès

Sànchez se ha mostrado "absolutamente coincidente" con el contenido de la conferencia del presidente de la Generalitat. El líder de Junts ha dicho varias veces que no quiere generar polémica con la mesa de negociación a pesar de reiterar que Junts no cree que ahora existan las condiciones para que este espacio "culmine favorablemente". Con respecto al discurso del líder del PSC, Salvador Illa, que también ha pronunciado desde la capital española, Sànchez le ha replicado que ya se hizo un nuevo Estatut, pero ha agradecido a los socialistas catalanes que se atrevan a poner propuestas sobre la mesa para poder discutirlas.

Finalmente, con respecto a la organización interna de Junts, Sànchez ha asegurado que no está ahora sobre la mesa la posibilidad de hacer un Congreso para renovar los cargos de la formación. Aun así, no lo ha descartado y lo ha considerado, incluso, "probable". Ha querido dejar claro, sin embargo, que en ningún caso el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont ha planteado que quiera dejar la presidencia del partido y ha añadido que "hablar de cosas que no están en la agenda crea confusión".